SEVILLA, 30 Abr. (EUROPA PRESS) -

El grupo de investigación de la Universidad de Málaga (UMA), dirigido por Francisco José López Gutiérrez y Pedro Luis Cobos, se encuentra desarrollando el proyecto 'Procesos de inferencia causal en situaciones de incertidumbre', que revela que el funcionamiento de la memoria depende del aprendizaje intuitivo de las personas.

En una nota, Andalucía Innova indicó que, a través de este trabajo, que arrancó en 2005 como Proyecto de Excelencia incentivado con 134.500 euros por la Consejería de Innovación, los investigadores han descubierto que la memoria está condicionada por los errores y aciertos que se cometen de forma intuitiva ante el mundo real.

"Hay que comportarse de manera eficaz en el mundo y las distintas situaciones nos ofrecen señales que nosotros interpretamos para comportarnos", explicó López, quien añadió que la mente adquiere conocimientos de un modo intuitivo --que funciona por ensayo y error-- y basado en el razonamiento --que requiere el uso del lenguaje y el esfuerzo--.

Así, afirmó que a través de pruebas de laboratorio con voluntarios se ha descubierto que los mecanismos intuitivos de aprendizaje condicionan la manera de pensar y el funcionamiento de la memoria, y que las asociaciones intuitivas ayudan a fijar conocimientos en la memoria.

En colaboración con la Universidad de Barcelona, el grupo malagueño quiso comprobar, a través de un registro encefalográfico, si los errores dejan huella en el cerebro, añadiendo así la perspectiva neurocientífica. De este modo, confirmaron que "cuando un individuo comente un error durante una tarea, antes de que él se dé cuenta, su cerebro ya lo ha captado y registrado", aseguró López, aclarando que "la próxima vez estará más preparado para no cometer el error, por lo que "eso de que se tropieza siempre con la misma piedra no es del todo cierto".