SEVILLA 7 May. (EUROPA PRESS) -

El miembro del Consejo de Estado de la República Francesa, Sami Naïr, calificó hoy la globalización como un acontecimiento "incontrolable que lleva a las mayores desigualdades económicas".

Estas afirmaciones fueron realizadas hoy durante el transcurso de la mesa redonda '¿Quién dice a dónde vamos?', celebrada dentro de la 'Semana Internacional de Economía Social y Sostenibilidad', organizada por la Confederación de Entidades para la Economía Social en Andalucía (Cepes-A) y que se clausura mañana.

En el encuentro, que fue moderado del coloquio la periodista María Esperanza Sánchez, participaron además el secretario general de la sección española de la Asociación de Periodistas Europeos, Miguel Ángel Aguilar, y el profesor de Ciencia Política en la Universidad Autónoma de Madrid, Carlos Taibo.

Naïr expuso los peligros del fenómeno de la globalización como un acontecimiento que conlleva al "caos económico en una fase extrema del capitalismo que experimenta en nuestros días su época más feroz"

Así, mencionó que un sistema económico sin regulación, la circulación anárquica de capitales, la competencia económica, la hegemonía de las multinacionales son algunos de los factores que conducen a la "catástrofe del asentamiento del neoliberalismo económico como corriente de pensamiento en foros de ideas como la universidad y a la catástrofe de pensar que el mercado se autorregula y que no necesita control".

Por su parte, Taibo indicó que la sociedad sería "ingenua" si creyera que "las personas que están en los gobiernos pueden decidir sobre las cosas importantes".

"No son más que organizaciones socioeconómicas que poco pueden intervenir en las reglas del juego económico internacional que dictan los mandatarios y magnates de las grandes empresas transnacionales. La política es la sombra de los grandes negocios", sentenció.

En este sentido, el profesor propuso revisar "drásticamente" las categorías económicas para encontrar un "mejor equilibrio entre competitividad, cohesión social y sostenibilidad".

En el mismo sentido se mostró Aguilar, quien definió la "fuerza expansiva e incontrolable" del capitalismo como sistema económico "único y opresor que está lejos de ver su fin". En una disertación sobre los desequilibrios mundiales, estableció las distancias entre ricos y pobres y definió la tendencia al absolutismo de "quienes no se conforman con la hegemonía económica y buscan ir más allá, buscan extirpar los malos ejemplos".