SEVILLA, 20 Jun. (EUROPA PRESS) -
Un grupo pluridisciplinar de investigadores andaluces, coordinados por la Universidad de Sevilla, estudian el desarrollo de nuevas tecnologías que integren la información procedente de redes inalámbricas de sensores, vehículos no tripulados, técnicas de planificación y hardware específico de medida y control en la conservación de la flora y la fauna.
Se trata de un proyecto que ha sido calificado de excelencia e incentivado con 150.000 euros por parte de la Consejería de Innovación, Ciencia y Empresa. Este trabajo, como explicó su investigador principal Aníbal Ollero Baturone, comenzó como una "ambiciosa" iniciativa de investigación interdisciplinar sobre el empleo de tecnologías de sistemas autónomos y sistemas distribuidos en redes inalámbricas para la monitorización y conservación del medio natural.
Según informó Andalucía Investiga en un comunicado remitido a Europa Press, los espacios de interés en los que se centran las investigaciones son la conservación del helecho Psilotum nudum, catalogado en España como "en peligro crítico"; en el seguimiento y estudio del hábitat del águila imperial ibérica; y en la detección y ayuda a la extinción de incendios forestales.
En palabras del especialista sevillano "en estos tres casos y en otras muchas posibles aplicaciones tienen un gran interés contar con datos e imágenes en tiempo real que permitan localizar y observar la evolución de las poblaciones (animales y vegetales) y ayudar a minimizar el impacto de desastres, tales como los incendios forestales".
Concretamente, se pretenden usar tecnologías de redes inalámbricas de sensores con nodos de bajo peso y consumo, en los que se integran funciones sensoriales, capacidades de procesamiento y comunicaciones inalámbricas. En este sentido, se contemplan tanto nodos fijos como móviles, transportados por vehículos, personas y animales. Especialmente, se intenta investigar en la integración de estas redes con sistemas de vigilancia y monitorización basados en el empleo de técnicas de visión artificial en las que se procesan imágenes obtenidas mediante cámaras fijas o móviles.
En definitiva, este proyecto de excelencia trata de estudiar las posibilidades que ofrecen los vehículos autónomos aéreos (UAV) y terrestres (UGV) para la adquisición de información y enlace de comunicaciones en lugares difícilmente accesibles.
Y es que el desarrollo acelerado de la tecnología de redes inalámbrica de sensores y la tendencia hacia vehículos aéreos no tripulados de bajo coste para aplicaciones civiles "hace previsible la implantación futura de las técnicas que pretendemos realizar", concluyó Aníbal Ollero.
