MALAGA, 29 Ene. (EUROPA PRESS) -
El Ayuntamiento de Málaga confía en poder llevar para su aprobación definitiva al pleno del próximo mes de marzo la ordenanza municipal para regular la venta ambulante en la ciudad y que entre en vigor en abril, después de que ya se haya abierto el plazo de un mes para la presentación de alegaciones.
La concejala de Empleo, Comercio y Vía Pública, Purificación Pineda, lamentó que "se haya tardado tanto" en publicar en el Boletín Oficial de la Provincia (BOP) el anuncio de que este documento estaba en información pública, puesto que este hecho implica un retraso en su aprobación definitiva, prevista para este mes de enero.
"Cuando se apruebe de forma definitiva esperemos que en el Boletín Oficial de la Provincia no se tarde tanto como ahora, más de un mes", manifestó a Europa Press la edil de Comercio y Vía Pública.
Pese a esto, Pineda afirmó que ya están trabajando para solucionar aspectos pendientes, como pueden ser la reordenación de estos espacios o la situación de la treintena de vendedores que en cada mercadillo opta por sorteo a ocupar un puesto vacante.
El Consistorio aceptó en torno al 90% de las sugerencias hechas por los comerciantes al borrador de esta ordenanza municipal antes de que fuera llevado al Pleno para su aprobación inicial, por lo que Pineda confía en que ahora no haya muchas alegaciones.
En este sentido, la concejala señaló que "hemos hecho un esfuerzo importante para asumir todas las sugerencias dentro de la propia ordenanza". En líneas generales, esta nueva normativa incluirá como novedades la realización de un plan de actuación en cada uno de los mercadillos existentes y el endurecimiento del régimen sancionador.
PLANES DE ACTUACION
Así, se elaborará un plan especial de actuación en cada mercadillo, delimitando el espacio que ocupa; el número de puestos, ya que éstos podrán ser de cuatro o de seis metros; las distancias entre cada uno de ellos; la zona de evacuación, o los servicios que prestará el Consistorio.
Además, se endurecerá el régimen sancionador a petición de los propios comerciantes, con el objeto de que las personas que no cumplan con lo establecido en la ordenanza puedan, incluso, perder su licencia si reiteran la comisión de faltas graves.
Las sugerencias que planteó el sector se referían sobre todo a cuestiones de detalles, con un carácter "básicamente técnico", según Pineda, como puede ser que los puestos tuvieran más metros de fondo o que la documentación se presentara una vez que estas personas sean adjudicatarias.
Por último, la edil indicó que el propósito del Area de Empleo, Comercio y Vía Pública es compatibilizar "la profesionalización del sector", de modo que los vendedores ambulantes puedan vivir "dignamente" de sus ventas, con la vida diaria en los barrios en los que se desarrollan los mercadillos.
