Málaga.-Tribunales.- Asuntos Internos investigó a agentes de la Udyco imputados por proteger locales a cambio de dádivas

MÁLAGA 3 Jul. (EUROPA PRESS) -

Agentes de Asuntos Internos de la Policía Nacional han investigado, dentro de la causa abierta contra cuatro inspectores de la Udyco-Costa del Sol por presuntas conductas irregulares dentro del ejercicio de sus cargos, la obtención de éstos, en concreto de uno de ellos, "de dádivas o regalos en consideración a su función y por prestar una especial protección a determinados establecimientos públicos de Marbella".

El juez de apoyo del Juzgado de Instrucción número 5 de Marbella (Málaga), Julián Cabrero Pérez, decretó en marzo pasado prisión para el jefe de la Sección de Crimen Organizado de la Udyco-Costa del Sol, Alfredo M., y para el inspector de la misma unidad en Marbella, Carlos F., que salieron en libertad tras pagar una fianza de 40.000 euros, mientras que dejó en libertad con cargos a otros dos inspectores detenidos destinados en Fuengirola, Isaac P., y en la capital, Eusebio V.

En uno de los oficios policiales, incluido en el procedimiento y fechado en junio de este año, se señala que "tal y como consta" en otras diligencias policiales anteriores, la investigación de los funcionarios de una Unidad de Asuntos Internos "permitió determinar" que una de las presuntas conductas delictivas que se achacaría al jefe inspector Carlos F. "estaría relacionada" con esa supuesta "percepción de dádivas y regalos" a cambio de "especial protección" a locales.

Entre los establecimientos públicos presuntamente favorecidos estaría, según dicho documento policial, al que tuvo acceso Europa Press, una conocida discoteca de Marbella, regentada por Arnaud F., que será juzgado este mes en el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA) junto con el presunto cerebro del caso 'Malaya', Juan Antonio Roca, y el que fuera juez de Instrucción número 2 marbellí, Francisco Javier de Urquía.

Así, los investigadores de Asuntos Internos señalan en su oficio que la investigación practicada en relación a esta actividad, a través de escuchas telefónicas y seguimientos, permitió determinar "un aprovechamiento" por parte de Arnaud F. "de la relación personal" con De Urquía y con la Policía "para proteger los intereses de particulares de terceros --otros responsables de locales-- y los suyos propios", en concreto tras haber sufrido una agresión y haber sido objeto de extorsión.

"Arnaud F. busca y encuentra la tutela y amparo judicial en el titular del Juzgado de Instrucción número 2 de Marbella y la protección policial en el Comisario Valentin B. y más tarde en el inspector Carlos F.", dice el escrito en el que se pedía autorización para registrar el local de ocio y el restaurante anexo, debido a que "las informaciones confidenciales obtenidas confirman la existencia de trato de favor a los sujetos investigados".

En este sentido, el oficio señala que existe "un agradecimiento material" hacia el policía; trato de favor que consistiría, entre otros, "en ser eximidos del pago de facturas por consumiciones" por parte de Arnaud F., que fue detenido por esta causa a mediados del pasado mes de junio, cuando regresaba de viaje, y al que se le imputa un delito de cohecho. Tras declarar ante el juez instructor, quedó en libertad sin fianza, pero con cargos.

En el auto de registro del local de este último imputado, se señala que "existen serios indicios que apuntan cuanto menos al trato de favor que el imputado recibe de determinados funcionarios policiales y otras autoridades", pues los investigadores tuvieron conocimiento de "la respuesta inmediata que recibe de aquellos cuando solicita asistencia para sí o para terceros".

"Trato preferente que vendría compensado por abonos en metálico o en especies, destacando así obra en las actuaciones, el pago hecho mediante favores sexuales por prostitutas, con dosis de sustancias estupefacientes o con continuas invitaciones al restaurante contiguo a la discoteca", según la resolución judicial. Arnaud F. negó estas imputaciones y tan sólo dijo haber invitado a cenar "sin esperar nada a cambio" a policías y a otras autoridades.