JAÉN 24 Ene. (EUROPA PRESS) -
El candidato a la Presidencia de la Junta de Andalucía por Coalición Andalucista (CA), Julián Álvarez, mostró hoy su respeto a la Iglesia católica, una institución con un "importantísimo papel", según aseguró, así como al derecho de los obispos andaluces "a tener su propia ideología y a defenderla como crean oportuno".
Preguntado por los periodistas en Jaén, Álvarez recalcó que nunca va a "entrar a discutir las posiciones en las que esté ninguna institución social". "Las voy a respetar siempre", según subrayó, porque los obispos "tienen un credo y una estructura de propuestas y posiciones y su misión es defender y transmitir a sus seguidores las ideas que consideren convenientes".
El candidato a la Presidencia de la Junta por CA defendió que hay que entender toda esta situación "en clave de lo que ellos son y lo que ellos representan" y desde el respeto. "Hay que entenderlo y no quiero hacer de la Iglesia católica un adversario electoral o un agente electoral", manifestó. Así, afirmó entender el papel que tienen los obispos, que "tienen en definitiva que lanzar estos mensajes en estas ocasiones".
Álvarez recalcó que ellos siempre han defendido la libertad y el derecho de expresión, "la hemos defendido cuando no teníamos derecho a expresar nuestra propia ideología y ahora no voy a coartar la libertad o el derecho de nadie".
Los Obispos del Sur de España, reunidos hasta ayer en Córdoba en su CX Asamblea ordinaria, dieron a conocer unas orientaciones pastorales sobre las próximas elecciones generales y autonómicas en Andalucía, recomendando a los votantes, entre otras cosas, que rechacen aquellos proyectos políticos que busquen ampliar el aborto o permitir la eutanasia.
A través de un comunicado, los obispos andaluces se dirigieron "a la comunidad católica y a todos los hombres y mujeres de buena voluntad", a quienes animaron a "emitir el voto en conciencia y con sentido de responsabilidad", asegurando que, "en este marco, criterios decisivos para juzgar las diversas opciones políticas los constituyen la tutela de la vida desde su concepción hasta su fin natural, y el apoyo a la familia y al matrimonio basado en la unión entre el hombre y la mujer".
De igual modo, a juicio de los obispos andaluces, "los proyectos, más o menos explícitos, de ampliar la ley del aborto o de abrir el camino a la eutanasia, deben ser claramente rechazados en el plano cultural y político".