JAÉN, 7 Feb. (EUROPA PRESS) -
Los sindicatos CCOO y UGT en la provincia de Jaén han reiterado su apuesta por un modelo de reparto en el olivar de las ayudas de la Política Agrícola Común (PAC) en el que "el valor central sea el empleo".
Así lo ha destacado este viernes después de que el director general de Producciones y Mercados Agrarios, Carlos Cabanas, se reuniera este jueves con representantes del sector y del Consejo Provincial del Aceite, una "comparecencia" que abandonaron "en protesta por la negativa del Ministerio a contar con la representación sindical de más de 800.000 trabajadores agrarios asalariados de este país, (100.000 en Jaén), en la discusión sobre la reforma de la PAC".
"Los máximos responsables de ambos sindicatos, José Moral y Manuel Salazar, junto con el presidente de UCE-Jaén, Alfonso Ibáñez, abandonaron la reunión al comprobar que el formato tenía más que ver con un acto político, convocado por el PP, que con una reunión de trabajo en la que se contase con la opinión y las propuestas de la representación legal de los trabajadores del campo jiennense", exponen en un comunicado.
Según precisan, en la provincia, de las 258.000 altas en la Seguridad Social durante el mes de diciembre, más de 110.000 figuran en el régimen agrario. A su juicio, es "impresentable" que en la regulación de las ayudas comunitarias se ignore la opinión de la mayoría del 42 por ciento de las personas que trabajan en Jaén y "se cuente únicamente con las patronales agrarias, que representan al diez por ciento de los perceptores de ayudas.
Los sindicatos han denunciado que esa negativa del Gobierno contrasta con la de otros grupos políticos del Parlamento Europeo que sí han mantenido reuniones en Bruselas con sindicatos y patronales agrarias del conjunto de Europa. "La nueva regulación de la PAC, sigue careciendo de medidas que pongan en valor el volumen y calidad del empleo asalariado en el campo de nuestra tierra. El resultado, una PAC donde priman las hectáreas sobre las personas", argumentan.
Al hilo, rechazan una reforma donde "sorprendentemente" los titulares de explotaciones tengan que justificar gastos de combustible o de contratación de empresas de servicios agrarios y no tengan que acreditar las contrataciones de asalariados, una partida que pueden suponer, en el caso del olivar en pendiente, costes de explotación superiores al 30 por ciento.
DEFENSA
"La defensa del olivar en pendiente, en Jaén, es una apuesta que compartimos, pero no solo porque sea menos productivo que las plantaciones en llano, sino por la tremenda dificultad para su mecanización lo que lo convierte en el principal generador de mano de obra en el olivar", han resaltado. Además, consideran que el Magrama no puede afirmar que este tipo de olivar haya aumentado su producción "mientras hacen oídos sordos al daño medioambiental que supone el riesgo de abandono de las más de 100.000 hectáreas ocupadas por este cultivo".
"Si finalmente se mantiene la Reforma de la PAC, tal y como nos vienen contando, gobierno, oposición y patronales agrarias, Jaén habrá perdido una ocasión única para regularizar el empleo agrícola y acabar con la economía sumergida que prima en este sector", han concluido.
