Córdoba.- El Hospital Reina Sofía implanta una nueva técnica con helio y electrocirugía para tratar la endometriosis

Actualizado: jueves, 24 julio 2008 15:39

El hospital cordobés ha sido el primer centro español en emplear este procedimiento

CÓRDOBA, 24 Jul. (EUROPA PRESS) -

El Hospital Universitario Reina Sofía de Córdoba ha incorporado una novedosa técnica quirúrgica que emplea el gas helio y la electrocirugía para tratar la endometriosis, una patología relacionada con el ciclo menstrual, que provoca que este tejido crezca fuera del útero y cuyas causas se desconocen con exactitud.

Este procedimiento, que se aplica en la Unidad de Endoscopia del Servicio de Obstetricia y Ginecología, trata de reducir las molestias que provoca esta enfermedad y recuperar la fertilidad. Al hilo de ello, el hospital cordobés destacó que el uso de la citada técnica ya se ha empleado en 15 mujeres "con excelentes resultados a corto plazo", puesto que las primeras pacientes se sometieron a este procedimiento a mediados del pasado año.

La administración del helio se suma a otros procedimientos quirúrgicos, entre los que figura el láser de dióxido de carbono y el de argón. El principal objetivo de la cirugía en esta patología es reducir o eliminar el dolor y tratar de recuperar la fertilidad.

El Reina Sofía ha sido el primer centro español en aplicar este tipo de cirugía con helio para abordar una dolencia que afecta al 10 por ciento de las mujeres en edad reproductiva y que es responsable del 35 por ciento de los casos de infertilidad femenina. De hecho, la endometriosis es la principal causa de abandono del trabajo y de bajas laborales en las mujeres con esta enfermedad.

En concreto, la endometriosis es producto de la extensión del tejido que recubre el interior del útero (endometrio) fuera de la cavidad uterina hacia los ovarios y/o la superficie de los órganos pélvicos vecinos. El tratamiento incluye medicación (generalmente hormonal) en las fases leves e intervenciones quirúrgicas sobre los ovarios y la pelvis.

En la mayoría de las ocasiones, el abordaje quirúrgico para tratar la endometriosis y sin dañar tejidos sanos que la rodea se realiza mediante laparoscopia, lo que permite resecar las áreas afectadas por la enfermedad mediante la extirpación. También es posible por cauterización (aplicación de calor intenso) o vaporización (con electricidad).

PRINCIPALES VENTAJAS

Este nuevo abordaje, que combina el helio y la electrocirugía, se denomina 'Helica' y emplea la vaporización para eliminar los tejidos afectados por la endometriosis. Su principal ventaja radica en los escasos efectos lesivos en las zonas no deseadas, pues la destrucción de los tejidos es de poca profundidad (de 1 y 1,5 milímetros). Ello permite proteger estructuras adyacentes a las lesiones como las arterias, venas y otros órganos y tejidos de la pelvis.

Dicha técnica permite igualmente hacer barridos completos por el peritoneo, en caso de enfermedad extensa, sin dañar los órganos sanos y eliminando superficies amplias afectadas por la endometriosis. El uso del helio está indicado en tres supuestos: mujeres con endometriosis leve y dolor crónico, cuando se asocia a esterilidad, y en pacientes con endometriosis grave relacionada con enfermedad pélvica extensa.

Por otra parte, con frecuencia se originan grandes quistes en los ovarios denominados 'quistes de chocolate', cuya extirpación en mujeres con problemas de fertilidad origina la perdida de multitud de óvulos sanos. Frente a ello, la nueva técnica permite vaporizar el endometrio prácticamente sin dañar el ovario y, por consiguiente, sin incidir en la fertilidad.

En concreto, esta intervención se lleva a cabo en la unidad de endoscopia del servicio de Obstetricia y Ginecología por el jefe de servicio de Ginecología y Obstetricia, José Eduardo Arjona, y los ginecólogos Blas Pelegrín y Ramón Guisado.

La endometriosis es una enfermedad crónica, caracterizada por cólicos o períodos menstruales muy dolorosos, menstruaciones con sangrados muy abundantes y dolor crónico en la pelvis (que incluye dolor de la espalda inferior y dolor pélvico), el intestino y también durante o después de mantener relaciones sexuales. Se puede presentar a cualquier edad durante el periodo fértil de la mujer, aunque se da con más frecuencia a partir de los 35 años y el dolor desaparece con la menopausia.