Córdoba.- La Junta cree que la mejor solución para la hija que maltrata a su madre es sacarla del entorno natural

CÓRDOBA 7 May. (EUROPA PRESS) -

El delegado del Gobierno andaluz en Córdoba, Antonio Márquez, informó hoy que la mejor solución para la hija que supuestamente maltrata a su madre, quien ha pedido que la la Junta asuma la tutela, es "sacarla del entorno natural en el que se produce esa situación".

En declaraciones a los periodistas, Márquez hizo así referencia al caso de la madre que ha reclamado a la Junta de Andalucía que se haga cargo de la tutela de su hija de 13 años porque, según manifestó en un programa de radio, la joven padece un trastorno de conducta disocial y agresiva y, supuestamente, le ha maltratado en numerosas ocasiones.

Márquez aclaró que la Junta ha ofrecido a la familia un tratamiento de atención y sacarla de ese entorno, pero recordó también que "en la tutela de la niña tiene que haber un pronunciamiento judicial".

El delegado subrayó que están abiertos a colaborar en las medidas de sus posibilidades a "darle una solución pacífica y evitar esas confrontaciones a las que la madre hace alusión, que sin duda son situaciones de violencia familiar". En ese sentido, mostró la "mejor predisposición" por parte de la administración autonómica, si bien apunto que "habrá que ver qué medidas se toman".

En declaraciones efectuadas a la Cadena Ser, la madre, que se identifica como Elena, ha dicho que su hija le hace "la vida imposible" y que en alguna ocasión incluso la ha agredido con un bate de béisbol. Según dijo, quiere que todo llegue al final por el bien de ella y de su hija y reconoce que, a veces, piensa en no abrirle la puerta de la casa cuando llega.

Elena asegura que los problemas comenzaron cuando le prohibió a su hija el noviazgo con un chico mayor de edad y con antecedentes penales. A partir de ese momento, dice que la convivencia en el hogar familiar se complicó de tal manera que las vidas de ambas "cambiaron totalmente".

De hecho, para la madre, la menor era una niña "totalmente normal" hasta que conoció a su pareja, momento en el que comenzaron a sucederse los episodios agresivos. En uno de ellos, la menor le hizo elegir a su madre entre los dos o nada, algo que la progenitora se tomó como "una tontería de hija". No obstante, según Elena, esta amenaza fue en serio porque cuando llegó a casa afirma que se tomó setenta pastillas y "se intentó suicidar".

Los episodios violentos se han agudizado ahora desde que la menor desea tener el bebé que espera en contra de la voluntad de su madre.