Córdoba.- El obispo afirma que las "rupturas históricas" de la unidad de la Iglesia son un "freno a la evangelización"

Actualizado: jueves, 10 enero 2008 15:17

CÓRDOBA, 10 Ene. (EUROPA PRESS) -

El obispo de Córdoba, Juan José Asenjo, manifiesta en su carta semanal con motivo de la Semana de Oración por la Unidad de los Cristianos que "las rupturas históricas de la unidad de la Iglesia, todavía vigentes por desgracia, son un freno a la evangelización, pues el mundo sólo creará en Cristo y en su Evangelio si los cristianos somos uno".

En su carta señala que "en estos días volvemos sobre el drama de nuestras rupturas y divisiones, algo que está en contradicción con la positiva voluntad de Cristo, que en la víspera de su Pasión, pide al Padre que su Iglesia sea una para que el mundo crea".

De este modo, apunta que, "además del diálogo doctrinal entre las distintas confesiones, de las relaciones institucionales y de la colaboración fraterna en los más diversos campos, la mayor y mejor contribución que los cristianos podemos prestar a la restauración de la unidad es la oración al Padre, siguiendo el ejemplo de Jesús".

En la carta pone de manifiesto que "la plena unidad de los cristianos no es sólo un problema" porque si así fuera, "se resolvería en un plazo más o menos breve". Desde su punto de vista, es "un misterio, cuya solución está en las manos de Dios; y es un don, algo que llegará cuando Dios quiera y por los medios que Él tenga establecidos". Además, insistió en que "la oración, junto con la conversión del corazón de todos los cristianos a nuestro único Señor, es el único camino viable hacia la unidad".

De este modo, señala que "nuestra oración por la unidad debe ser en primer lugar contemplativa, centrada en el misterio trinitario, principio y modelo de la unidad de la Iglesia". Debe ser también "gozosa y dolorida, penetrada de alegría por lo mucho que nos une con los otros cristianos, y también del dolor que nace de comprobar nuestras divisiones, que son piedra de escándalo y obstáculo para el anuncio del Evangelio".

Según apunta, "debe ser además penitencial, como signo de arrepentimiento por las culpas que a cada uno nos corresponden en las rupturas de la unidad, porque aunque los cristianos de hoy no seamos responsables directos de las divisiones históricas, no es menos cierto que sí lo somos de la unidad no lograda, por nuestras omisiones, indiferencias, autosuficiencia, ignorancia y despreocupación y, sobre todo, por nuestros pecados".

La Semana de Oración por la Unidad de los Cristianos se celebrará del 18 al 25 de enero y, entre otras actividades, se hará una exposición sobre la III Asamblea Ecuménica Europea de Sibiú (Rumanía), dirigida por María José Delgado, directora del Instituto Misionero de la Unidad de Madrid.

También participarán el Delegado Diocesano de Ecumenismo y Vicepresidente de la Asociación Centro Ecuménico Misioneras de la Unidad (Acemu), Manuel González, y los seminaristas del Seminario Mayor San Pelagio de Córdoba.

Finalmente, el obispo presidirá la Eucaristía de Clausura de la Semana en la parroquia de la Inmaculada y San Alberto Magno de Córdoba.