CÓRDOBA, 18 Ago. (EUROPA PRESS) -
La Audiencia Provincial de Córdoba ha archivado el caso de la muerte de la joven de 31 años Casta Carrillo ocurrido hace 13 años en Puente Genil (Córdoba) al considerar que la investigación ha llegado a un punto en el que no se avanza.
Según informaron a Europa Press fuentes cercanas al caso, en primer lugar fue archivado por el juez instructor de Puente Genil, resolución que fue recurrida en apelación y que finalmente, la Audiencia Provincial de Córdoba desestimó a finales del pasado mes de junio.
La Audiencia consideró que "el testimonio de dos testigos que señalaban a un grupo de personas, del que sólo se conocía una identidad, era de poca consistencia y que la investigación he llegado a un punto muerto donde lo más aconsejable era archivar el caso".
En concreto, uno de estos testigos, que estaba protegido, apuntaba a un grupo de amigos de Lucena (Córdoba) que se dirigieron el día del suceso, el 20 de julio de 1995, hasta el municipio sevillano de Écija para adquirir sustancias estupefacientes y posteriormente, en su regreso a Lucena, se encontraron a Casta Carrillo en el canal de riego Genil-Cabra, después de que saliera a pasear en bicicleta, donde la atacaron y la forzaron a subir al vehículo.
Los jóvenes la agredieron hasta matarla y la trasladaron hasta un olivar próximo a Puente Genil, en la carretera que une esta localidad con Santaella (Córdoba), donde fue encontrada muerta una semana después por unos agricultores.
Cabe recordar que cuando se hicieron las pruebas de ADN se demostró que la chica había peleado con varios agresores porque tenía sangre de uno de ellos en las uñas y pelo de otro de los implicados en la otra mano.
Sobre el caso se han llegado a abrir varias líneas de investigación, si bien esta parecía ser la más fiable. Una de ellas, estuvo orientada en la solicitud que se hizo al aparecer el cadáver de Sonia Carabantes, en el término municipal de Álora (Málaga), en la que se pedía la contrastación del ADN de su agresor con los de Casta. Otra línea de investigación se abrió cuando una señora, que se identificó en una llamada a la Guardia Civil de Puente Genil, facilitó los datos concretos de una persona como posible autora de los hechos.
Ahora, después de que se haya decidido archivar el caso, la familia está indignada "porque se habían dado datos muy concretos por parte de los testigos". Además, y "debido a una serie de contracciones entre testigo y el joven identificado, la Guardia Civil solicitó un careo entre ambos, pero el juez instructor dijo que no era necesario y archivó el caso, siendo confirmado por la Audiencia al considerar que hay imputaciones de poca consistencia".
