CÓRDOBA, 29 Jun. (EUROPA PRESS) -
El sindicato CSIF y el Colegio de Enfermería en Córdoba han expresado este jueves su condena a la agresión sufrida el lunes de esta semana por una trabajadora y una enfermera del Módulo de Enfermería del Centro Penitenciario de Alcolea, en la capital cordobesa, por parte de un preso. Desde Instituciones Penitenciarias han confirmado que "el interno se puso agresivo" y realizó los actos "de forma sorpresiva", por lo que "tuvo que ser reducido".
Según ha explicado el sindicato en una nota, la afectada fue una trabajadora que el lunes por la tarde fue atacada en el Módulo de Enfermería de la prisión por un interno, que cuenta con antecedentes por amenazas, coacciones y agresiones a funcionarios.
Concretamente, el recluso propinó a la profesional varios golpes en un brazo y en una mano, impactos por los que esta trabajadora tuvo que recibir atención especializada en un centro hospitalario de la capital.
Además, el sindicato ha informado de que, previamente a esta agresión, "el interno provocó un altercado regimental con una enfermera del establecimiento a la que se dirigió a voces y de una manera despectiva, cuestionando su profesionalidad y con comentarios sexistas".
Posteriormente a este episodio, el interno destrozó dos celdas y todo lo que encontraba a su paso mientras era trasladado a aislamiento.
Ante estos hechos, CSIF Prisiones ha solicitado a la Dirección del Centro Penitenciario de Alcolea que traslade a este interno a otra prisión "con carácter de urgencia".
Igualmente, la central sindical ha criticado "la carencia de medios humanos y materiales en el centro penitenciario", al mismo tiempo que ha demandado "una formación continua y especializada a la plantilla".
"Urge de manera imperiosa la necesidad de que estos profesionales sean considerados como agentes de la autoridad", han recalcado desde esta sección sindical, que también ha reclamado al Ministerio del Interior "un aumento del personal penitenciario con suficientes ofertas de empleo público, así como la equiparación salarial de estas plantillas con las de los centros penitenciarios catalanes, con quienes se mantienen diferencias retributivas a pesar de desarrollar el mismo trabajo".
Mientras, desde el Colegio de Enfermería han mostrado su condena "enérgica" ante la agresión sufrida por la trabajadora y la enfermera en el Módulo de Enfermería del Centro Penitenciario. "Agresiones físicas, verbales y comentarios sexistas a las enfermeras son intolerables", han subrayado.
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