CARMONA (SEVILLA), 11 Jul. (EUROPA PRESS) -
El mediador Javier Alés ha destacado que "la creatividad es el resumen de todas las habilidades que se necesitan en la mediación" y que hay que tener creatividad porque "las personas que vienen a los mediadores están en un callejón sin salida, no saben qué hacer y necesitan profesionales que vean más allá y busquen soluciones a su situación".
Alés ha hecho estas manifestaciones durante el 'Curso de especialización sobre mediación en familia y sucesiones' que se celebra hasta este viernes dentro de la programación de la XVII edición de los Cursos de Verano de la Universidad Pablo de Olavide (UPO) en la localidad sevillana de Carmona.
Además, el experto ha señalado que "cada vez más, desde la Administración o desde el Gobierno se está impulsando la mediación, por ello, hay un anteproyecto de Ley de impulso a la mediación". "La mediación es un método, una técnica o un proceso que ayuda a que las partes que están enfrentadas puedan abrir un canal de diálogo con nosotros como responsables de ello", ha explicado.
En temas de familias o herencia, según Alés, "hay muchas cosas detrás. Las partes se van a relacionar en el tiempo, y yo creo que si un asunto o un conflicto de familia o sucesiones está mal resuelto, puede hacer mucho daño durante mucho tiempo. Incluso, afectando a varias generaciones. Por eso, la mediación pone un poco de cabeza en estos temas de familias tan particulares".
Ha comentado en la conferencia que "una de las cosas más importantes que tienen que aprender es desaprender". "Hay alumnos que vienen de distintas carreras: trabajo social, educación social, psicología, derecho. Yo creo que ellos han aprendido un método o una técnica, cada uno en sus carreras, que sirven para su entorno, pero un conflicto tiene tal cantidad de aristas, que hace falta un método distinto".
Con respecto a las situaciones de herencias, Alés ha apuntado que "lo importante es que los hermanos pueden tener posiciones diferentes; también, es cierto que la posición pasa al interés porque todos están interesados en buscar un acuerdo y, luego, está el punto de la necesidad: necesitan llegar a un acuerdo. Hay casos en los que el tema económico es una excusa, el tema era el perdón entre los hermanos por el cuidado de los padres en una familia".
"En esos casos, entramos en la gestión de las emociones de estas personas. Hay que saber de comunicación no verbal, de emociones, de traducción de mensajes y eso es muy lejano de nuestra formación de origen", ha puntualizado.
Sobre el futuro de la mediación, el experto ha explicado que "hay un problema: no hay una cultura de mediación". "A nosotros nos han enseñado desde pequeños que cuando tengas un problema, pones una queja, una reclamación o una denuncia. Ahora, estamos haciendo un trabajo muy intenso, desde hace unos años, de intentar enseñar este método en las escuelas y nos estamos implicando en las aulas. Que los niños aprendan que antes de denunciar, puedan aprender a hablar o negociar", ha incluido.
