GRANADA, 26 May. (EUROPA PRESS) -
La Policía Nacional ha detenido a un padre y su hijo, de iniciales E.R.L. de 51 años y A.R.H. de 21, por la supuesta a agresión a unos agentes que intentaban controlar una riña vecinal en la calle Torredelcampo, en la capital granadina, acusados de un delito de atentado contra la autoridad.
Según informó la Policía en una nota, el detenido más joven fue el que a las 1.00 horas de ayer comenzó a tocar el claxon de su vehículo en dicha calle para que los agentes apartaran su vehículo policial, a lo que la Policía le pidió que se desviara por otra calle mientras finalizaban la intervención.
El reseñado, lejos de deponer su actitud, comenzó a tocar el claxon de forma insistente a la vez que a insultar a los agentes de Policía, por lo que éstos, una vez finalizada la intervención, le solicitaron que se identificase, a lo que éste se negó, insultando y amenazando a los actuantes, momento en el que su acompañante abandonó al vehículo siguiendo instrucciones del reseñado de avisar a la familia con intención de amedrentar a los policías.
El reseñado, que bajó del vehículo prosiguiendo con su actitud agresiva, propinó un fuerte empujón a uno de los agentes, por lo que procedieron a su detención, tras un fuerte forcejeo que causó lesiones en una mano a uno de los policías.
Mientras esto sucedía, en el lugar se personaron familiares y vecinos del detenido llegando a congregarse unas 30 personas que amenazaban, insultaban y empujaban a los actuantes.
Durante el tumulto, el padre del detenido llegó a agredir a uno de los funcionarios propinándole un puñetazo, por lo que se procedió igualmente a su detención.
Los reseñados han pasado por estos hechos a disposición judicial, careciendo el primer detenido de antecedentes previos y constándole al segundo una detención anterior por delito contra la propiedad.
A UNA JOVEN Y SU AMIGA POR ROMPER RETROVISORES.
Igualmente, la pasada madrugada se detuvo a M.G.C., mujer de 19 años, a la que se le imputan los delitos de resistencia y desobediencia, amenazas y daños, y a su amiga R.S.C., también de 19 años, acusada de un delito de daños.
Los hechos sucedieron a las 03.00 horas en la Avenida de la Constitución de la capital, cuando, tras recibir llamada en la Sala Operativa 091 en la que se comunicaba que unas jóvenes se encontraban en los alrededores fracturando los espejos retrovisores de los vehículos que se encontraban a su paso, se personó la dotación policial que interceptó en el lugar a las reseñadas.
Allí, los agentes comprobaron que se encontraban en las inmediaciones cuatro vehículos con daños producidos en sus espejos, así como diversas personas que habían sido testigos de estos hechos, por lo que se procedió a la detención de las reseñadas por el delito de daños, comenzando la primera de ellas a resistirse a la detención a la vez que profería diversas amenazas a los agentes actuantes.
Ambas jóvenes carecen de antecedentes previos, y está previsto que pasen a disposición judicial en las próximas horas.
Esta misma madrugada también se ha detenido a L.C.E., de 47 años, en un centro hospitalario de la capital por un supuesto delito de amenazas graves, después de que, tras haber sido invitado por los servicios de seguridad a abandonar el centro hospitalario, ya que se encontraba en su interior profiriendo voces e insultos contra el personal facultativo porque no le estaban atendiendo con la celeridad que esperaba, volviera momentos después esgrimiendo una barra de hierro de 1,75 metros de longitud.
Con ella arremetió contra los vigilantes, a la vez que amenazaba a los mismos de muerte, consiguiendo éstos repeler la agresión.
