Jaén.- La Junta auspicia el deslinde de dos montes de Génave "para facilitar la propiedad de los terrenos a los vecinos"

JAÉN 7 Sep. (EUROPA PRESS) -

La Junta de Andalucía, a través de la Consejería de Medio Ambiente, procederá a mediados de este mes de septiembre al deslinde de los montes Cuarto del Ardal y Palancares, de propiedad pública y conveniados para su gestión con la Junta de Andalucía, para delimitar la parte forestal de la agrícola que los vecinos cultivan desde hace siglos o bien han destinado desde tiempo ancestral a pastos para ganadería.

La delegada provincial de Medio Ambiente, Amparo Ramírez, junto al alcalde de Génave, Juan Pedro Samblás, se reunió con vecinos del municipio que cultivan estas tierras y que hasta el momento no podían escriturar sus terrenos por hallarse en zona forestal para explicarles el procedimiento.

La Ley Forestal otorga a la Junta de Andalucía la competencia para la ejecución del deslinde de los montes y delimitar de esta forma qué parte de ellos sigue siendo forestal. Hasta el momento, la Administración autonómica trabaja en la gestión forestal --aprovechamientos, ordenaciones de montes o tratamientos selvícolas-- de Palancares y Cuarto del Ardal, una atención que proseguirá una vez que se haya realizado el deslinde.

Los montes Cuarto del Ardal y Palancares suman una superficie de 2.270 hectáreas. Desde hace cientos de años, la agricultura ha ganado terreno a la masa forestal y se han generado cientos de pequeñas parcelas de olivar, viñedo y cereal en su mayoría que constituyen desde hace años un importante recurso económico para las familias del municipio.

El cultivo de los montes ha alcanzado en este tiempo las tres cuartas partes de la superficie total de Palancares y Cuarto del Ardal, lo que significa hablar de casi 1.800 hectáreas divididas en más de 4.000 parcelas. Según concretó la delegada provincial de Medio Ambiente, "tras el deslinde de la Junta y el acuerdo de cesión por parte del Ayuntamiento, los propietarios podrán escriturar los terrenos y acceder a la propiedad definitiva mediante un acuerdo entre quienes cultivan y quienes ostentan la titularidad, que sea beneficioso para quienes tienen una parcela en la zona".