GRANADA 6 Mar. (EUROPA PRESS) -
El anteproyecto de Ley de Derechos y Garantías de la Dignidad de las Personas en el Proceso de la Muerte inicia su última fase de tramitación con la remisión del texto al Consejo Consultivo para su revisión. Tras este trámite, que tiene un plazo máximo de un mes, el anteproyecto será sometido a la aprobación del Consejo de Gobierno para iniciar, posteriormente, su debate parlamentario.
La consejera de Salud, María Jesús Montero, anunció hoy en Granada este nuevo paso de la ley, en el marco del seminario organizado por la Cátedra Andaluza de Bioética con la ponencia titulada 'Anteproyecto de Ley de Andalucía sobre muerte digna', según informó en un comunicado la Junta de Andalucía.
El objetivo de este texto normativo es regular el ejercicio de los derechos del paciente durante la última etapa de la vida, asegurando su autonomía y el respeto a su voluntad y dignidad, así como los deberes de los profesionales sanitarios encargados de la atención y las funciones de las instituciones y centros sanitarios.
Durante su ponencia, la máxima responsable de la sanidad andaluza destacó la importancia de mejorar la accesibilidad al documento de voluntad vital, de forma que todos los profesionales que participan en el proceso de atención sanitaria tengan acceso al mismo, agrega la nota.
En este sentido, la consejera señaló que el documento de voluntad vital se incorporará, de forma sistemática y obligatoria, a la historia digital de salud para facilitar a los profesionales el acceso a la información contenida en esta declaración, y anunció la posibilidad de ampliar los puntos asignados para que los ciudadanos puedan hacer efectiva su declaración de voluntad vital anticipada, que hasta ahora se venía registrando en las sedes de las delegaciones provinciales de la Consejería.
Junto a estas medidas de accesibilidad, la Consejería de Salud promoverá un programa de formación para los profesionales sanitarios sobre este derecho, con el objeto de que puedan asesorar a los ciudadanos que deseen ejercerlo.
Estas iniciativas de mejora se contemplan en el Anteproyecto de Ley de Muerte Digna, que regula el ejercicio de los derechos del paciente durante la última etapa de la vida, asegurando su autonomía y el respeto a su voluntad y dignidad, así como los deberes de los profesionales sanitarios encargados de la atención y las funciones de las instituciones y centros sanitarios.