BARCELONA/SEVILLA, 28 Ene. (EUROPA PRESS) -
Banco Sabadell registró en Andalucía el pasado año un volumen total de negocio de 8.000 millones de euros, entre inversión y recursos, de forma que la comunidad andaluza sigue siendo la tercera en importancia para el banco en términos de volumen de negocio, tras Cataluña y Madrid.
Según indicó el banco en una nota remitida a Europa Press, la entidad posee 117 oficinas en Andalucía.
Precisamente, a mediados de diciembre el presidente de Banco Sabadell, José Oliu, indicó en Sevilla que el banco espera duplicar en unos tres años su cuota de mercado en Andalucía, que aglutina el 10 por ciento de todo el grupo Sabadell, en cuanto a número de oficinas, clientes y negocio.
Oliu precisó entonces que en 2004 se registró un negocio en Andalucía de 5.700 millones, de forma que en cinco años aumentaron un negocio un 40,3 por ciento y este año se registró un estancamiento de cifras, algo motivado por la pérdida de recursos pero que viene contrarrestado por la inversión crediticia.
Agregó entonces que de los 8.000 millones de negocio en Andalucía, un 60 por ciento corresponde a inversión crediticia y un 40 por ciento a recursos, según indicaron desde el banco, que precisaron que para 2010 están previstas aperturas en Granada, Almería y Palmones, en Los Barrios (Cádiz).
Por otro lado, a nivel global, el presidente del Banco Sabadell, Josep Oliu, constató hoy que 2010 será un año de inflexión, tanto para la entidad como para la economía española, y pronosticó que si se cumplen sus previsiones el banco despegará en resultados en 2011, con lo que este año será el último en tránsito por la recesión económica y los resultados no diferirán mucho de los cosechados en 2009.
En rueda de prensa de presentación de resultados del pasado ejercicio --el beneficio atribuido del grupo se redujo un 22,5 por ciento, hasta los 522,5 millones de euros--, Oliu explicó que el año en curso estará marcado por la presión de los márgenes de intereses, el incremento de las comisiones por gestión de activos, un esfuerzo en costes para tener gastos recurrentes planos, un máximo de mora que rondará el cinco por ciento en el tercer trimestre y un crecimiento del crédito positivo, aunque moderado.
Ante este escenario, el banco dará por finalizado este año el Plan Óptima y preparará uno nuevo, a tres años, para consolidar su posición y liquidez.
