Salud estudia regular mediante una norma o decreto la práctica diaria de las clínicas de cirugía estética

Actualizado: miércoles, 15 agosto 2007 12:56

Señala que esta medida responde, además, a la petición elevada por el propio sector

SEVILLA, 15 Ago. (EUROPA PRESS) -

La consejera de Salud, María Jesús Montero, anunció que su departamento está trabajando en la elaboración de una norma o decreto, --aún se está estudiando el tipo de rango que llevará--, que regule la práctica diaria de las clínicas de cirugía estética, una medida que responde "al auge que este tipo de intervenciones está teniendo cada vez con más frecuencia entre la población joven y adolescente".

En una entrevista concedida a Europa Press, la titular de Salud pormenorizó que, entre otras medidas, la futura norma o decreto pretende establecer la "obligatoriedad" para todas las clínicas del sector "de que hagan públicos, incluso desde internet, del porcentaje de éxito que disponen en las distintas intervenciones que llevan a cabo, así como de otros indicadores como encuestas de satisfacción entre sus usuarios".

Montero, quien avanzó que su departamento ya tiene a un grupo de expertos trabajando en esta línea, estimó que para el próximo mes de octubre "estaremos en condiciones de presentar el borrador de la futura norma", la cual también contempla la "obligatoriedad" de que dichas clínicas recojan en cada caso el consentimiento informado del propio usuario que se quiere someter a una de esta técnicas.

Además de este documento, dichas clínicas tendrán también la obligatoriedad de recoger un informe psicológico del cliente que determine la capacidad del menor para asumir los cambios corporales que sufrirá su cuerpo si se somete a esta intervención.

"Con este informe psicológico queremos garantizar que el menor está en condiciones de asumir el cambio corporal que sufrirá tras la intervención", argumentó Montero, quien añadió que con el consentimiento informado "lo que queremos es asegurarnos de que el paciente tiene toda la documentación relativa a su crecimiento natural, las consecuencias que podrían derivarse de una intervención de estas características y, por tanto, de los riesgos que asume si finalmente decide someterse a la operación".

Montero señaló que estas medidas responde "no sólo al auge que este tipo de intervenciones está teniendo entre la población adolescente, sino a petición de las propias clínicas que nos han solicitado que fijásemos algún tipo de regulación en su materia, sobre todo, para evitar la competencia desleal".

En este sentido, la consejera del ramo explicó que el propio sector se ha quejado que unas clínicas "son más éticas que otras a la hora de aplicar unos requisitos mínimos para someter a una intervención de cirugía estética a una menor, sobre todo, en lo que a ampliaciones de mama o lisposucciones se refiere, prácticas por otra parte que viene siendo las más demandada por esta población".

CAMPAÑAS ENTRE PADRES Y ADOLESCENTES.

Precisamente para ahondar en el conocimiento de estas prácticas entre la población general, anunció que su departamento también prevé llevar a cabo una campaña de información "dirigida expresamente a los padres y adolescentes y haciendo hincapié en la conveniencia de que tengan en cuenta las distintas fases por las que pasa el cuerpo humano hasta completar su desarrollo, de cara a una posible operación estética".

"Es bueno incrementar el conocimiento entre la población acerca de los límites de la cirugía estética y sobre cuestiones como que el crecimiento del cuerpo no finaliza hasta que no se cumple la mayoría de edad en la mayoría de casos", incidió la titular de Salud, quien

Recordó que el decreto de atención a los menores establece que en los adolescentes con menos de 16 años "se tiene en cuenta su opinión, si bien son sus padres o tutores --salvo si se encuentra emancipado-- los que tienen la capacidad de decisión a la hora de que puedan someterse o no a una operación del tipo".

En cualquier caso, admitió que en mayores de 16 años el criterio del menor "prima sobre el del equipo médico o el de los padres o tutores". En este contexto, aclaró, "es en el que planteamos todas estas medidas que permitan garantizar a usuarios y padres que conocen perfectamente los pormenores y riegos de estas intervenciones", ya que, aunque serán de obligado cumplimiento por parte de las clínicas, los informes no serán vinculantes en el caso de que el cliente decida definitivamente asumirlos.

AUMENTOS DE MAMA COMO REGALO DE CUMPLEAÑOS.

Así, y a modo de ejemplo, expuso que se informarán a las jóvenes que tenga una mama inferior a la media, y quieran por ello someterse a una ampliación de la misma, "que ello no significa que no tenga por delante un período de desarrollo natural".

"Con estos elementos ayudaremos también a los padres de las menores de 16 años para que sepan decidir mejor que es lo más le conviene a su hijo", enfatizó a Europa Press Montero, que concluyó que "no es infrecuente que cada vez con más frecuencia las niñas soliciten como regalo de cumpleaños un aumento de mama o una liposucción".