SEVILLA, 2 May. (EUROPA PRESS) -
Los vecinos de la barriada del Arenal (Sevilla) no notaron hoy "grandes cambios" en la situación del tráfico en la zona por los comienzos de las obras de instalación de un carril de circulación exclusiva para taxis y autobuses públicos en el Paseo de Colón, aunque expresaron su pesimismo al entender que "los problemas no tardarán en llegar".
Con respecto a las obras, fuentes municipales informaron a Europa Press que en el día de hoy se ha procedido al inicio de la señalización, diversas mediciones y supresiones de señales de tráfico de la zona como pasos previos a la instalación física de los separadores.
Las fuentes consultadas indicaron que los separadores, de modelo celosía y atornillados al suelo de la misma forma que en otras zonas de Sevilla como la calle Torneo o la avenida de Menéndez Pelayo, comenzarán a ser colocados mañana o el jueves.
Al no haberse producido aún la instalación física de dichos separadores, el tráfico del Paseo de Colón aún no se vio afectado por el procedimiento. El presidente de la asociación de vecinos 'Guadalquivir' del Arenal, Antonio Fernández, confirmó este extremo a Europa Press, si bien supuso que las obras futuras "no dejarán el tráfico en la zona mucho peor de lo que ya está".
Fernández, en este sentido, señaló que la asociación que preside ha elevado un escrito ante el alcalde de Sevilla, Alfredo Sánchez Monteseirín, y la Gerencia de Urbanismo debido a la "insostenible" situación de la barriada.
Entre las medidas propuestas por los vecinos del Arenal, destacan la regulación del tráfico de la calle Zaragoza con bolardos de fibra óptica; la necesidad de regular zonas de carga y descarga en calles como Adriano y Federico Sánchez Bedoya; permitir un tráfico "fluido" de la calle Antonia Díaz; una presencia "efectiva" de la Policía Local o un cambio de los "enormes" autobuses de las lanzaderas de Tussam por microbuses. En virtud del compromiso adquirido por el concejal de Gobernación, Francisco Fernández, con los colectivos de taxistas y vecinos, está previsto que el trazado de este carril abarque el recorrido completo del Paseo de Colón. Su objetivo es impulsar la movilidad del transporte público --taxis y autobuses de Transportes Urbanos de Sevilla--, en contraprestación por el reciente cierre al tráfico rodado de la céntrica y estratégica avenida de la Constitución, una medida que ha levantado protestas por parte del sector del taxi y de otros colectivos como vecinos y comerciantes.
Una vez comiencen las obras en el Paseo de Colón, el citado carril entraría en funcionamiento en cuestión de una semana para el transporte público.
