SEVILLA, 22 May. (EUROPA PRESS) -
La formación ecologista Los Verdes se reunió hoy con representantes de la Consejería de Obras Públicas y Transportes de la Junta de Andalucía para debatir el sistema de protección que reúne mayores garantías para preservar la vegetación y las especies implantadas en el jardín del restaurante Río Grande, fundamentalmente los palmitos; en este sentido, una de las peticiones del colectivo es la de que cesen las inyecciones de 'jet-grouting' en los terrenos del establecimiento.
En declaraciones a Europa Press, el delegado de Los Verdes en Sevilla, Rafael Crespo --en representación de la agrupación ecologista junto al diputado nacional Francisco Garrido y el coordinador andaluz, Francisco Oñate--, afirmó que la consecuencia más inmediata de la reunión es la intención de llevar a cabo análisis y toma de muestras del suelo, tanto por parte de Los Verdes como de la Junta.
Por parte de la Consejería, estuvieron presentes el viceconsejero, Luis García Garrido; el director general de Transportes, Rafael Candau; el delegado provincial de la Consejería en Sevilla, Lucrecio Fernández; y el ingeniero agrícola en Hortofloricultura y Jardinería, director del servicio de Parques y Jardines en Expo 92 y redactor de los informes de la situación de los palmitos en Río Grande, Alberto García Camarasa.
Las muestras pasarían por una comprobación analítica de contaminante en cada grupo de palmitos, consistentes en una medición del PH y de la conductividad eléctrica. Crespo, en este sentido, incidió en que las posibles soluciones al conflicto pasan por "no trasplantar los palmitos", sino llevar a cabo 'in situ' la medida que corresponda.
Por otro lado, la maquinaria sigue sin funcionar en Río Grande desde que hace una semana un grupo de simpatizantes de Los Verdes ocuparan, con el consentimiento de la dueña de Río Grande, María del Carmen García, los terrenos del restaurante, impidiendo así el trabajo de los operarios. El delegado de Los Verdes en Sevilla, al respecto, indicó que "hay un retén permanente, pendiente de lo que pueda pasar".
La paralización y la posterior obstrucción por parte de los ecologistas que impedían la vuelta al trabajo de los técnicos motivó que la UTE Metro de Sevilla presentara en los juzgados una denuncia contra Crespo y María del Carmen García.
