SEVILLA, 19 Abr. (EUROPA PRESS) -
La FAMP y la Agencia Provincial de la Energía de Cádiz, socios del proyecto 'GreenS-Green public procurement supporters for innovative and sustainable institutional change' ('Soporte a la Compra Pública Sostenible para un cambio institucional innovador y sostenible'), financiado por la Unión Europea con cargo al Programa de Investigación e Innovación Horizonte 2020, han lanzado este martes en Sevilla la Red Andaluza de Compra Pública Sostenible (Racps).
Esta red, según ha informado la FAMP en un comunicado, dará soporte a las actividades que desarrollen este tipo de compra en el territorio y ofrecerá un marco para la cooperación entre las administraciones públicas y empresas aplicando modelos de gestión pública sostenible.
De este modo, la red andaluza "brinda un cauce para trabajar por la normalización y progresiva institucionalización de la contratación pública con criterios de sostenibilidad medioambiental, tanto en el marco del proyecto GreenS, del que surge, como posteriormente a su finalización, convirtiéndose así en un elemento aglutinador de sinergias de los resultados que resulten del proyecto durante su ejecución en Andalucía".
El lanzamiento de la Racps se realiza a través de la firma de un memorando de cooperación, al que ya se han adscrito las entidades que forman parte del Comité de Pilotaje de GreenS y que está abierto a la incorporación de todas aquellas organizaciones públicas y privadas que deseen contribuir a una gestión pública más sostenible, ha añadido la FAMP.
"La inclusión de criterios ambientales en las contrataciones públicas es una ayuda fundamental para conseguir los retos ambientales actuales y futuros, ya que estas compras favorecen la reducción de la huella de carbono unida a medidas de compensación, la reducción del ciclo de vida de los productos, la reducción de la contaminación atmosférica, las buenas prácticas agrícolas con el consumo de productos ecológicos y la adaptación al cambio climático, contribuyendo a frenar la deforestación y evitando directamente las emisiones fruto de los procesos productivos", ha explicado.
Numerosas autoridades europeas --incluyendo las instituciones europeas y gobiernos regionales y locales-- están añadiendo estos criterios en sus prácticas de contratación "buscando una mayor coherencia institucional y una mayor eficacia en la consecución de objetivos ambientales y sociales".
Por otra parte, numerosos gobiernos locales están comprometidos con la consecución de objetivos de sostenibilidad en su toma de decisiones.
En la cuarta Conferencia Europea de Ciudades y Pueblos Sostenibles Aalborg +10, más de 110 líderes de gobiernos locales firmaron los Compromisos de Aalborg, que incluyen entre otros, adoptar un uso prudente y eficiente de los recursos y "promover activamente el consumo y la producción sostenible, especialmente los productos con etiqueta ecológica, orgánicos y de comercio ético y justo".
La Administración Pública es una de las principales consumidoras en Europa y representa una importante cuota de mercado para determinados sectores. Se calcula que la contratación pública en la Unión Europea representa unos 2.960.000 millones de euros, el 16% de su PIB. Sólo en España, las compras públicas suponen unos 130.000 millones de euros, alrededor de un 13% de su PIB.
Así, la Administración Local, a través de la compra pública, "puede ejercer una enorme influencia en el mercado y contribuir a que el comportamiento más sostenible de las empresas se convierta en una ventaja competitiva".
El proyecto Greens, en el que participan socios de siete países de la Unión Europea, tiene como principal objetivo impulsar y aumentar la capacidad y habilidades de las autoridades públicas para ahorrar energía, reducir emisiones de CO2 y reducir costes aplicando soluciones innovadoras en el ámbito de la Compra Pública Sostenible, mediante el establecimiento de "estructuras de apoyo permanente", a las que Greens se refiere como G.P.P.S. (Unidades de Apoyo a la Compra Pública Verde), dentro de las Agencias de la Energía participantes. Iniciado en junio de 2015, este proyecto europeo se encuentra ya en su segunda fase de ejecución.
