ZARAGOZA 8 Jul. (EUROPA PRESS) -

El Centro Aragonés de Investigación en Tecnología Asistiva (CAITA) pone en marcha dos pisos pilotos creados como entornos inteligentes para la vida autónoma de las personas dependientes, gracias a un acuerdo de colaboración que la Universidad de Zaragoza y el Gobierno de Aragón firmaron hoy en el Edificio Paraninfo.

El rector de la Universidad de Zaragoza, Manuel López, la consejera de Ciencia, Tecnología y Universidad, Pilar Ventura, y la consejera de Servicios Sociales y Familia del Gobierno aragonés, Ana Hernández, suscribieron el citado acuerdo, por el que se crea CAITA, que desarrollará actividades de "inteligencia ambiental", investigación, formación y transferencia de conocimiento para la integración social de las personas ancianas y con discapacidad.

El grupo de Investigación del Instituto de Investigación en Ingeniería de la Universidad de Zaragoza, TECNODISCAP, coordinará este nuevo Centro en el que se identificarán las necesidades de los usuarios, y se desarrollará I+D y nuevos productos para dar soluciones, tanto en el área de soporte, como en el aprendizaje de habilidades que permitan una mayor autonomía personal.

El director del proyecto de TECNODISCAP, Jorge Falcó, manifestó que "el 23 por ciento de la población aragonesa tiene más de 65 años, y de ellos, el 6,5 por ciento son discapacitados". "El objetivo del proyecto es que las personas puedan quedarse más tiempo en sus hogares, que, al fin y al cabo, es lo que ellos quieren", añadió.

Los dos pisos inteligentes, ubicados el nuevo barrio zaragozano de Valdespartera, cuentan con tecnologías ocultas que controlan hasta el último rincón de la casa. El frigorífico y la lavadora, por ejemplo, cuentan con sensores de etiquetas que detectan si los alimentos han caducado, o si se introduce en el tambor cualquier otra cosa que no sea ropa.

Las viviendas, cedidas por el Ayuntamiento de Zaragoza, también incluyen dispositivos que permiten la detección de alarmas y situaciones de emergencia, como caídas, o inactividad. Además, los usuarios disponen de ayudas técnicas que facilitan el acceso a elementos cotidianos como la televisión o el vídeo, e incorporan servicios de apoyo, como dispositivos de orientación temporal que ayudan al usuario a entender el paso del tiempo.

Otra de las novedades de estos hogares habilitados son los sistemas de monitorización, que recogen información del usuario para que un terapeuta pueda anticiparse a posibles problemas o enfermedades.

Una vez comprobado el funcionamiento de estos pisos piloto, la tecnología inteligente para la vida autónoma se trasladará a residencias de la tercera edad del Gobierno de Aragón. La Residencia 'Romareda', del Instituto Aragonés de Servicios Sociales, será la primera candidata. Además, en la residencia se incluirá un programa de ocio terapéutico destinado a potenciar actividades de ocio y rehabilitación.

La consejera Ana Hernández afirmó que "se trata de un trabajo muy interesante para los colectivos y personas que atiende el Departamento de Asuntos Sociales". Y aseguró que se hará todo lo posible para facilitar que las empresas fabriquen estas tecnologías que, según manifestó, "son muy útiles sobre todo para los cuidadores de los ancianos". Además, destacó que el equipo que compone el grupo "tiene un gran prestigio a nivel europeo".

Asimismo, agregó que "con este proyecto Aragón puede ponerse a la cabeza de España en relación con los dependientes, que suponen un porcentaje elevado en la comunidad".

El Centro de Investigación en Tecnología Asistiva, de carácter multidisciplinar en los ámbitos tecnológico, biomédico y social, se estructura en cuatro áreas de trabajo. En primer lugar, el Área de Observatorio, que recoge y estudia las estadísticas de demografía de la Comunidad, así como la vigilancia tecnológica en cuanto a la dependencia y la discapacidad.

En el Área de Adaptación I+D se adaptará o creará nuevas tecnologías para el dependiente. Otras de las áreas son las de Formación y Validación.

De momento, se están terminando de integrar los pisos, y se espera que la tecnología esté lista a finales de mes. Además el Centro está pendiente de las pruebas necesarias para certificar que todo funciona correctamente.

Por su parte, la consejera de Ciencia, Tecnología y Universidad, Pilar Ventura, aseguró que, "su Departamento está muy satisfecho con el convenio", y añadió que, "con las ventajas que ofrece CAITA se evita el aislamiento y exclusión de personas dependientes".

LA EXPERIENCIA DE TECNODISCAP

TECNODISCAP aporta a CAITA su I+D y su experiencia. La actividad investigadora del grupo se encuadra en la línea prioritaria "ambientes inteligentes", con tres áreas de aplicación fundamentales: monitorización, soporte a las actividades de la vida diaria y soporte terapéutico para rehabilitación. En este sentido, en primer lugar, se aportan los resultados de las investigaciones realizadas en el marco de dos importantes proyectos europeos. El proyecto MonAmi: 'Mainstreaming on Ambient Intelligence' y el Easy Line+.

MonAmi es un proyecto europeo en el que trabajan catorce universidades y empresas de siete países europeos y que cuenta con un presupuesto de 13,7millones de euros, de los que 0,83 millones de euros corresponden a la Universidad de Zaragoza. Se trata de, hasta la fecha, el mayor proyecto europeo en el área de tecnologías de la información para personas mayores y personas con discapacidad.

El proyecto MonAMI demuestra que se pueden ofrecer servicios accesibles y útiles para personas mayores o con discapacidades que residen en sus viviendas dentro de los sistemas y plataformas generales. Los servicios se ofrecen con dispositivos de gran penetración tales como televisión digital, teléfonos de tercera generación e Internet de banda ancha. Colaboran con TECNODISCAP en este proyecto residencias de la tercera edad del Gobierno de Aragón, Colegio de Educación Especial 'Alborada', Disminuidos Físicos de Aragón, Atades y el Centro de Convivencia 'Río Ebro'.

Por su parte, Easy Line + es un proyecto europeo, liderado por BSH Zaragoza, que involucra a cuatro países y tiene un presupuesto de 2,1 millones de euros, de los que 0,36 millones de euros corresponden a la Universidad de Zaragoza. Este proyecto estudia el soporte específicamente en la cocina, probando tecnologías recientes como el RFID o la comunicación en red ZigBee para el soporte en tareas de la cocina. Colabora el Consistorio zaragozano.

CAITA también se beneficiará de los resultados de otros proyectos de investigación en los que actualmente participa TECNODISCAP como AmiVital y Tratamiento 2.0, dentro del ámbito de la inteligencia ambiental y e-salud, liderados respectivamente por Siemens e Indra y que cuentan con un presupuesto total de 24,7 millones de euros y de 7,8 millones de euros, cada uno de ellos.

Asimismo, CAITA también utilizará los resultados de GAD, en el campo de la eficiencia energética, CISVI, en la línea de los espacios sociales de investigación, AmbienNet, proyecto de investigación basado en los entornos inteligentes, y otros proyectos propios que el grupo lleva a cabo en colaboración con entidades locales como AIDIMO o el Colegio de Educación Especial 'Arboleda'.