ZARAGOZA, 24 Nov. (EUROPA PRESS) -

La solución para que las empresas aragonesas puedan ser competitivas en el mercado global agroalimentario es trabajar en innovación, llegando a un manejo integrado de todas las variables de la producción sin perder de vista la orientación hacia el mercado. Así lo indica la Universidad de Zaragoza y el Parque Científico y Tecnológico Campus de Aula Dei que, con este fin, organizan desayunos tecnológicos.

Los 'desayunos tecnológicos' fomentan la cultura de la innovación en el sector agroalimentario y propician un marco de diálogo en la que se establezcan las necesidades de la empresa y la línea de investigación, según señalaron fuentes del departamento de promoción tecnológica del PCTAD.

Estos desayunos tecnológicos, que comenzaron el 30 de octubre, seguirán realizándose una vez al mes durante el año 2008 y tratarán temas relacionados con el sector de la agroalimentación y medioambiental. Fuentes del PCTAD informan que el próximo tema a tratar en los desayunos puede ser la calidad y seguridad alimentaria o la alimentación funcional.

El primero de ellos se centraron en el sector ganadero, en concreto en la producción animal. Este foro reunió a diez empresas y asociaciones del sector cárnico (tanto producción como comercialización) y a ocho investigadores de la Unidad de Producción y Sanidad Animal del Centro de Investigación y Tecnología Agraria y de la Facultad de Veterinaria de la Universidad de Zaragoza.

El tema surgió ante la situación de crisis que atraviesa la ganadería en Aragón debido, entre otras cuestiones, al incremento de los costes de producción y su falta de repercusión en la cadena de valor de los alimentos. En este marco, "el sector ganadero aragonés, en línea con el resto de Europa, es consciente de que para sobrevivir y ser competitivo es necesario apostar por la modernización", según se desprende de las conclusiones del foro.

Así, los centros de investigación en el Parque Científico y Tecnológico Campus de Aula Dei y en la Universidad de Zaragoza van a intensificar las líneas de trabajo sobre nuevas presentaciones de productos al mercado y sobre la estandarización del manejo del ganado, que permita la creación de alimentos más saludables, con un mejor control de todo el proceso: alimentación y bienestar animal, entre otros.

Para ello, y con el fin de garantizar la supervivencia de explotaciones tradicionales, los investigadores reforzarán asimismo las líneas de trabajo centradas en los sistemas de producción que mejoran la calidad de vida de los ganaderos. En especial, en el sector ovino, uno de los más afectados por la crisis actual.

Más en concreto, se incidirá en la transferencia a las empresas de las investigaciones realizadas en el ámbito del uso de los recursos del territorio por la ganadería extensiva, para la producción y evaluación de forrajes, sistemas de producción en condiciones de montaña y zonas semiáridas y limpieza de zonas boscosas con pastoreo de rumiantes.

También, se insistirá en el aumento de la rentabilidad de la producción ganadera y, de forma paralela, la disminución de los costes. Además, se continuará estudiando alternativas a las producciones clásicas y mejorando la calidad de la carne de ovino y vacuno.