PERDIGUERA (ZARAGOZA), 10 Abr. (EUROPA PRESS) -
El presidente del Gobierno de Aragón, Jorge Azcón, ha visitado este miércoles Perdiguera (Zaragoza), donde hace cinco años, en dirección a Leciñena, hubo "uno de los incendios forestales más destructivos que ha tenido la Comunidad Autónoma". Ha anunciado un plan de reforestación para todo Aragón, que supondrá una inversión de 10,2 millones de euros.
El próximo mes de julio se cumplirán 5 años desde que las tierras de la sierra de Alcubierre entre Perdiguera y Leciñena fueron arrasadas por uno de los incendios más graves de la historia reciente de Aragón.
"En total, fueron 869 las hectáreas afectadas por una temeridad que en estos momentos está siendo juzgada. 869 hectáreas quemadas que cambiaron la fisionomía de estos montes y en los que ahora trabajamos para su recuperación", ha cuantificado el presidente.
Ahora comienza la reforestación de Perdiguera, donde ardieron 850 hectáreas, y el Gobierno regional invertirá 880.000 euros de los fondos Next Generation, que se elevarán a dos millones de euros para reforestar otras zonas afectadas por incendios forestales en Valmadrid, Luna, Zuera, Orés y Castiliscar.
"Los proyectos de reforestación no solamente los anunciamos en campaña electoral, sino que los acreditamos con hechos: En mi época de alcalde de Zaragoza se hizo la campaña más importante de reforestación de Zaragoza", en alusión al proyecto del Bosque de los Zaragozanos.
"Aspiro a que ahora hagamos lo mismo en todo Aragón", ha continuado Azcón, quien ha detallado que con este primer plan de reforestación se plantarán más de dos millones de árboles, "así que cada aragonés tendrá la posibilidad de plantar un árbol en un de los bosques que hay en la Comunidad Autónoma".
Ha expuesto que en Aragón hay unos 2,5 millones de hectáreas de superficie forestal, el 60 por ciento del territorio, aunque una parte está desarbolada, de ahí este plan de reforestación, que se extenderá hasta 2027, con una inversión de 10,2 millones de euros en todo el periodo, lo que Azcón espera superar con aportaciones de empresas, ayuntamientos y diputaciones provinciales.
Además de los beneficios que el plan va a tener sobre el medio natural, también va a tener un impacto directo en la economía del medio rural. Se estima que cada hectárea sobre la que se actúa requiere entre 10 y 12 jornales de trabajo, lo que implica un total de entre 20.000 y 24.000 jornales de mano de obra directa.
"Los trabajadores que se desplazarán a nuestro medio rural, se alojarán en sus establecimientos y consumirán en sus restaurantes y tiendas", ha recordado Azcón.En definitiva, "la apuesta de este Gobierno es muy clara: queremos un Aragón más verde, con mejor calidad del aire, más sostenible y a la vanguardia en la lucha contra el cambio climático", ha concluido.
Uno de los objetivos es "mitigar el cambio climático, en especial proteger los suelos frente a la erosión". Se plantarán árboles en 500 hectáreas cada año: "En dos años haremos el trabajo que se hizo en los últimos ocho años"
El jefe del Ejecutivo autonómico ha aclarado que "este trabajo no puede ser solo de la Administración", sino que debe serlo "de todos", mostrándose convencido de que se conseguirán los objetivos con los servicios técnicos y la sociedad aragonesa en su conjunto, lo que reforzará la conciencia medioambiental, ya que el patrimonio natural aragonés "es una joya".
Con este plan, la Administración analizará si la reforestación natural de las superficies quemadas ha sido exitosa. "En el caso de que no lo sea, intervendremos", ha anunciado.
Ha puntualizado que "no es absolutamente nada incompatible" implementar este plan de reforestación, en el marco del Pacto Verde Europeo, y que VOX, socio de gobierno del PP de Jorge Azcón, rechace este acuerdo de la UE. "Todos los Gobiernos de la UE ya han acordado realizar cambios", ha zanjado.
También ha considerado que "el Pacto Verde Europeo es una filosofía que, evidentemente, tiene muchos aspectos positivos", como la plantación de 3.000 millones de árboles en toda la UE. "Eso no es discutible".
RESTAURACIÓN FORESTAL
La directora general de Gestión Forestal, Ana Oliván, ha explicado, en relación al incendio de Perdiguera hace cinco años, que primero se retiró la madera quemada y después el Gobierno regional decidió acometer la restauración al comprobar que la regeneración natural "no era tan buena como podríamos desear".
Ahora se están plantando las mismas especies que cubrían originalmente la zona, principalmente sabina albar y mora, pino carrasco y encinas
Para acometer la reforestación de Perdiguera y Leciñena se han identificado los montes de utilidad pública, sobre los que el Departamento de Medio Ambiente tiene competencia directa, se han señalado las superficies desarboladas y, dentro de estas, las que se pueden reforestar. También se revisará la ordenación de los montes y, además, el Gobierno ha consultado a los 731 municipios para que indiquen la disponibilidad de los terrenos y su interés en formar parte de este proyecto.
