ZARAGOZA, 7 Oct. (EUROPA PRESS) -
Caja Inmaculada (CAI) ha destinado 50.000 euros a la Fundación Adunare para favorecer la integración social, educativa, cultural y laboral de personas excluidas o en riesgo de exclusión.
En concreto, esta aportación se dedicará por un lado, a equipar ocho centros sociolaborales que atienden a alumnos en situación de exclusión socioeducativa o fracaso escolar y, por otro, al Programa de Animación Deportiva (PAD) que se desarrolla en el barrio Oliver de Zaragoza, para promover la práctica del deporte entre niños y jóvenes.
Con esta aportación se refuerza la colaboración que mantienen Caja Inmaculada y la Fundación desde 2008; ese año CAI aportó 100.000 euros a esta organización para rehabilitar las instalaciones del taller de repostería del Centro Sociolaboral de las Fuentes, crear el Centro de Día para personas con enfermedad mental en el barrio de Torrero, con capacidad para 40 usuarios, y desarrollar el Programa de Animación Deportiva en el barrio Oliver.
Actualmente, la Fundación desarrolla 19 programas de ámbito local y autonómico en los que participan 2.500 personas; para ello, cuenta con una plantilla de 130 trabajadores y la ayuda de más de 90 voluntarios.
En esta ocasión, la colaboración de Caja Inmaculada permitirá equipar ocho centros sociolaborales de Adunare según los requisitos de los nuevos Programas de Cualificación Profesional que ofrecerá a jóvenes en situación de exclusión socioeducativa; se prevé que 360 jóvenes participarán en estos programas.
Para el curso 2009-2010, la Fundación impartirá las especialidades de Programas de Cualificación Profesional Inicial para ayudante administrativo (2 módulos); tabiquería y revestimientos (2 módulos); instalaciones electrotécnicas y telecomunicaciones; carpintería y mueble (3 módulos); operario auxiliar de mecanizado y montaje; camarera de pisos, lavandería y limpieza; y viveros y jardines.
Por otra parte, el Programa de Animación Deportiva (PAD) en el barrio Oliver de Zaragoza se dirige a fomentar la práctica de deporte entre la población del barrio Oliver como medio de integración social y de desarrollo integral de la persona. Además, está permitiendo consolidar estructuras deportivas estables que gestionan los propios vecinos.
Gracias a este programa, 62 niños, de 10 a 16 años, están realizando deporte federado en las modalidades de fútbol sala, baloncesto y voleibol. Entre otras actividades, también destaca la Carrera Popular Oliver, una de las citas más importantes del calendario de Atletismo de Zaragoza, que se celebra el 5 de marzo.
