ZARAGOZA, 21 Dic. (EUROPA PRESS) -
El responsable de la Secretaría de Cultura de Chunta Aragonesista (CHA), Miguel Martínez Tomey, ha expuesto este miércoles las cuatro alegaciones que ha presentado su partido al anteproyecto de la orden por la que se establecen las bases reguladoras para la concesión de subvenciones en materia de cultura en el Gobierno de Aragón.
Así, en rueda de prensa, ha señalado que estas alegaciones se deben a que "en el contexto de recortes generalizados, salvajes, en el que nos encontramos hay que tratar este tema con la máxima transparencia, garantía y limpieza", sobre todo en materia de cultura donde la Comunidad aragonesa "tiene las máximas competencias posibles".
Tomey ha expuesto los cuatro puntos que desea que sean mejor definidos y que están centrados en la definición de los beneficiarios, la formación del tribunal, los plazos de decisión y las adjudicaciones.
En lo que se refiere a los beneficiarios, ha apuntado que en el anteproyecto presentado por el Gobierno aragonés no se especifica lo suficiente que las empresas y los empresarios que opten a estas ayudas deben estar afincados en Aragón.
"Insistimos en el que en artículo 2 de la Orden no debe haber ninguna duda en que las empresas o entidades que accedan a estas subvenciones deben ser sólo aragonesas", ha aseverado.
En este sentido, ha reiterado que "la única mención que se hace a que sean de Aragón es en las artes escénicas, cuando desde CHA creemos que deberían ser todas empresas legalmente constituidas aquí y esto debería recogerse para todos los ámbitos culturales en los que se concedan subvenciones".
Tomey ha pedido esto porque "los graves recortes que se están dando en otras comunidades autónomas pueden provocar que muchas empresas de otros lugares pidan las subvenciones y los aragoneses se queden fuera de ellas".
AMPLIACIÓN DEL TRIBUNAL
Por otro lado, el responsable de la Secretaría de Cultura de CHA ha propuesto que se amplíe el tribunal que decide la entidad a la que van dirigidas estas subvenciones.
El Gobierno de Aragón ha recogido en el anteproyecto que dicho tribunal estará compuesto por tres técnicos del Departamento de Cultura del Ejecutivo aragonés, aunque cabría la posibilidad de que estos recurriesen para tomar su decisión a asesores externos, algo que para Chunta es "insuficiente".
Tomey ha matizado que "no debe ser tan restrictivo" y que debería incorporarse un técnico de otra administración aragonesa y dos externos, es decir, "que no sean de la administración pero que tengan voz y voto".
Por supuesto, ha proseguido, estos dos técnicos externos "deberían ser personas en contacto constante con la realidad cultural, expertos, pero siempre estando al margen de la convocatoria, es decir, que ninguna de las empresas de los técnicos soliciten subvenciones, de ser así, el miembro debería ser sustituido".
PLAZOS
En la tercera alegación, CHA pide que los plazos de decisión sean "más breves". En el documento presentado por el Ejecutivo aragonés el tribunal tiene seis meses para decidir sobre las subvenciones "algo que es excesivo".
El responsable de la Secretaría de Cultura ha considerado que este plazo debe reducirse a tres meses "si alargamos el periodo podemos poner en una situación complicada a los que optan a las ayudas. Además, en tres meses un tribunal tiene que tener la capacidad de tomar una decisión".
La última alegación de Chunta Aragonesista se centra en las adjudicaciones fuera de la convocatoria. Así, ha explicado que en el artículo 2J de la Orden se habla de ayudas que pueden ser adjudicadas "fuera de las convocatorias".
Para Tomey, el documento es "demasiado laxo" en este ámbito, ya que "deja la puerta abierta a todos los supuestos para recoger propuestas fuera de plazo". Ante esto, ha considerado que "tampoco es cuestión de introducir rigidez, pero se pueden recoger determinados supuestos para dar más seguridad a las empresas".
Por último, ha agregado que todas las alegaciones que presenta CHA tienen la finalidad de que "las bases den tranquilidad a las entidades que se presenten" en un periodo de crisis económica en el que ha habido "serios recortes, sobre todo en cultura".
