Este libro supone un paso más para completar el mapa toponímico del Norte de la Península
SANTANDER, 12 Ene. (EUROPA PRESS) -
El doctor en Filología por la Universidad de Cantabria (UC), Marcelino Cortés Valenciano, ha publicado el libro 'Toponimia de las Cinco Villas de Aragón', basado en su tesis doctoral homónima elaborada en el marco del programa de doctorado 'Pensamiento, lengua y cultura' del Departamento de Filología.
En la publicación se explica el origen y el significado del nombre de los principales lugares de las Cinco Villas y con él se pretende no solo rellenar el vacío de este tipo de estudios en esta comarca, sino también completar el mapa toponímico del Norte de la Península con una de las teselas que todavía faltaba en este complejo mosaico lingüístico, ha indicado la UC en un comunicado.
La obra editada por el Centro de Estudios de las Cinco Villas de la Institución Fernando el Católico se presentó el pasado 7 de enero en Ejea de los Caballeros (Zaragoza) en un acto que contó con la asistencia del presidente de la Diputación Provincial de Zaragoza, Javier Lambán.
El libro tiene su origen en la tesis doctoral titulada 'Toponimia de las Cinco Villas de Aragón', que fue dirigida por la doctora María Fátima Carrera de la Red, y se defendió en Santander en junio de 2008.
En total, se analizan 122 topónimos que comprenden los nombres de los actuales municipios, de las entidades locales menores y de los antiguos despoblados. El análisis no se circunscribe únicamente a los nombres de lugar de la actual comarca de las Cinco Villas, sino que por un criterio de rigor científico se extiende a todos aquellos núcleos de población que formaron parte del antiguo Partido Judicial de Ejea de los Caballeros y también a los dos enclaves navarros situados en la comarca (Petilla de Aragón y Los Bastanes).
Del trabajo se desprende que la toponimia de las Cinco Villas tiene una base fundamentalmente latina, fruto de una tardía pero intensa romanización que ha dejado también sus huellas en numerosos topónimos que deben su denominación a los nombres y apodos de los antiguos propietarios de esos lugares. Este predominio de topónimos de origen latino se matiza con una significativa presencia de topónimos de origen prerromano (Ejea, Sádaba, Biel) y una presencia muy exigua de topónimos de origen árabe.
El panorama se completa con una serie de topónimos que reflejan el proceso de reconquista y repoblación del territorio acaecido durante la Edad Media (Uncastillo, Castiliscar, entre otros).
EL NOMBRE DE EJEA
El libro también da una explicación definitiva al nombre de Ejea, uno de los topónimos que más controversia ha generado entre la comunidad científica, especialmente después de que Ramón Menéndez Pidal señalara que Exea derivaba del euskera etxea "casa". Además de desestimar lingüísticamente esta teoría, el topónimo Ejea --que aparece en las monedas como Sekia-se explica a través de la raíz del antiguo indoeuropeo sek--, "corriente de agua", que está presente en numerosos nombres de ríos de toda Europa.
