FSIE Huesca lamenta que la Ley de Autoridad Pública ampare sólo a los funcionarios docentes

Actualizado: lunes, 21 septiembre 2009 17:03

HUESCA, 21 Sep. (EUROPA PRESS) -

La Federación de Sindicatos Independientes (FSIE) en Huesca ha lamentado que la Ley de Autoridad Pública ampare sólo a los funcionarios docentes, una vez que ha conocido el anuncio de la presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, de una ley que reconozca como autoridad pública a los docentes de educación Primaria y Secundaria de los centros públicos.

Esta posición ha sido trasladada hoy por el secretario general de FSIE en Huesca, Ángel M. Morán, quien ha precisado que "de no corregirse para Madrid, y luego para el conjunto del Estado, la norma supondría la exclusión y marginación total de quienes trabajamos en los centros concertados y privados, tanto de los docentes como no docentes".

FSIE, que recordó que en junio solicitó esta medida al Ministerio de Educación al conocer un informe de la Fiscalía General del Estado en este sentido, aseguró que "de ponerse en marcha la nueva norma en los términos en los que se anunció la semana pasada, se estaría dejando la puerta abierta para que se generen situaciones graves, muy perjudiciales e incluso esperpénticas".

Ángel M. Morán ha opinado que la sociedad "no puede permitir que una agresión física sea tratada con diferente rasero en función de quién reciba el golpe y de quién sufra las consecuencias". Por eso, esta ley, "que pretende que la disciplina y el respeto a las normas regresen a las aulas a través de la disuasión, debe actuar protegiendo al débil en todos los casos".

De lo contrario, ha apuntado, "no será útil y habremos perdido otra excelente oportunidad para llegar a un pacto educativo sólido que interesa a todos, administración, padres, profesores y sociedad en general".

Desde FSIE en Huesca han valorado la mejora que para la seguridad de los compañeros de la enseñanza pública puede suponer esa ley, pero también han manifestado que va a trabajar todo lo posible para que la ley ampare a unos y otros, con independencia del centro en donde se trabaje.