ZARAGOZA, 15 Abr. (EUROPA PRESS) -
El Patio de la Infanta de Ibercaja, en la capital aragonesa, acoge la exposición 'La sombra de Oteiza en el arte español de los años cincuenta', que reúne un total de 46 obras de artistas de la época que se vieron influidos por el escultor vasco o que reflexionaron sobre cuestiones creativas similares a las que él promovió.
La muestra fue presentada hoy por el responsable de actividades culturales de Ibercaja, José Luis Lasala, el comisario de la exposición, Alfonso de la Torre, y el director del la Fundación Museo Oteiza de Alzuza (Navarra), Gregorio Díaz.
La inauguración oficial tendrá lugar esta tarde, a las 20.00 horas, acto que estará presidido por la directora de la Obra Social de Ibercaja, Teresa Fernández. La muestra estará abierta hasta el próximo 2 de julio. Los horarios de visita serán los siguientes: de lunes a viernes, de 18.00 a 21.00 horas; sábados, de 11.00 a 14.00 horas y de 18.00 a 21.00 horas, y domingos y festivos, de 11.00 a 14.00 horas.
José Luis Lasala señaló que la exposición "no es exactamente sobre Oteiza", sino que se trata de "una reflexión en torno a él como catalizador de expresión en los años cincuenta" y de cómo su figura "fue un revulsivo del arte español del siglo XX".
Por su parte, el director del Museo Oteiza, Gregorio Díaz, destacó que Jorge Oteiza (Orio, 1908-San Sebastián, 2003) fue "un artista involucrado en todos los movimientos artísticos de mitad del siglo XX desde Córdoba hasta Santander". Además, dijo que fue "un hombre que escribió mucho" y que aportó un pensamiento teórico al arte que "engarza la expresión de la posguerra con la de antes de 1936".
La exhibición consta de 46 obras de Oteiza y de otros artistas como Angel Ferrant, Eduardo Chillida, Néstor Basterretxea, 'Equipo 57', Manolo Gil, Andreu Alfaro, Vicente Castellano, Salvador Montesa, José María de Labra, Manolo Millares, Leandre Cristòfol, Remigio Mendiburu, Manuel Rivera, Pablo Serrano, Fermín Aguayo, Manuel Calvo, Francisco Farreras, Eloy Giménez Laguardia, Santiago Lagunas, Pablo Palazuelo, Gerardo Rueda y Eusebio Sempere, Rafael Canogar, Luis Feito o César Manrique.
La muestra se completa con la presencia de numerosa documentación, un conjunto de correspondencia inédita de Jorge Oteiza y la proyección de una selección de noticias del NO-DO referidas a eventos plásticos celebrados en los años cincuenta.
El comisario, Alfonso de la Torre, manifestó que la muestra es "un tránsito" por "exposiciones, galerías y grupos de la época" que tuvieron relación con Oteiza, quien "impulso a los artistas a viajar a París y conocer las tendencias".
En la selección de obras, De la Torre agradeció a los Museos de Bellas Artes de Bilbao y Córdoba, entre otras instituciones, la colaboración, y agregó que ha realizado la elección de las obras "teniendo en cuenta el movimiento de reflexión artística que se produce en la década de los cincuenta".
PIEZAS DE LA DÉCADA DE LOS CINCUENTA
Las piezas corresponden a la década 1948-1958, que se inicia con la vuelta a España de Jorge Oteiza, y finaliza cuando el artista obtuvo el gran premio de escultura de la Bienal de Sao Paulo (1957), gracias a la obra 'Propósito Experimental', que le supondría el reconocimiento Internacional y tras el que abandona la actividad escultórica en 1959.
En el Patio de la Infanta se puede ver un conjunto de esculturas y cuadros del arte español de los años cincuenta, con las que se propone un recorrido transversal en torno a Oteiza y su influencia, relación y confrontación estética con los artistas claves de esa renovación artística.
La exposición está dividida en tres secciones, 'Preámbulo', 'Confluencias' y 'Contexto'. En 'Preámbulo' se rinde homenaje a la figura de Ángel Ferrant, del que se exhiben cuatro obras. Ferrant fue un creador central para Oteiza y los artistas de 'El Paso', admirado por los jóvenes pintores de los cincuenta y referente moral de las nuevas generaciones.
El espacio dedicado a las 'Confluencias' refleja la vinculación activa de Oteiza con diversos integrantes de la vanguardia de los años cincuenta. Aquí se visualizan las influencias, propuestas, correspondencia y flujo de ideas con artistas como Basterretxea, Eduardo Chillida, 'Equipo 57', Manolo Gil, e integrantes del Grupo 'Parpalló' o Manolo Millares.
La sección 'Contexto' evoca algo del mundo artístico más próximo a Jorge Oteiza. Proximidad que además de estilística es, en algunos casos, de tipo personal, como Cristòfol, Mendiburu, Rivera o Serrano. En este apartado destaca la importancia de las opciones próximas al arte formativo, aunque no se relacionasen con el artista vasco, como Aguayo, Calvo, Farreras, Laguardia, Lagunas, Palazuelo, Rueda y Sempere.
También se hace mención a la obra de ciertos creadores que, de modo previo a su paso por el informalismo, tuvieron un período calificado como 'La tentación constructiva', ejemplificado en los casos de Canogar, Feito o Manrique.
Asimismo, se puede contemplar una escultura del aragonés Pablo Serrano, que "tuvo muchos puntos en común con Oteiza" en lo artístico, según comentó De la Torre, "aunque en lo personal estuvieron alejados".
Las obras presentes en esta exposición de Zaragoza proceden de numerosos prestadores privados, así como de instituciones como el Museo Patio Herreriano de Valladolid, IVAM-Instituto Valenciano de Arte Moderno, Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía, Artium, Museo de Bellas Artes de Bilbao, Museo de Bellas Artes de Córdoba, Museo Víctor Balaguer, Museo Municipal de Arte contemporáneo de Madrid, Museu d'art Jaume Morera, Fundación Caja Duero, Centro Cultural Gaya Nuño, Centro Andaluz de Arte Contemporáneo, Fundación Santillana o la Fundación Palazuelo, además de Ibercaja, entre otros.
