El consejero municipal de Urbanismo, Víctor Serrano - EUROPA PRESS
ZARAGOZA 4 Jun. (EUROPA PRESS) -
El consejero municipal de Urbanismo, Víctor Serrano, ha asegurado que se reunirá, "a la mayor brevedad posible", con los vecinos de las calles Río Huerva y La Luz afectados por la construcción de una pasarela peatonal sobre el cauce que pasa cerca de sus viviendas y alertan de posible falta de seguridad.
Serrano ha contado que hay una pasarela que, por las características técnicas que desde la Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE) se entiende como "prescripción mínima de altura", tiene una rampa de acceso cercana, en torno a los 7 metros de las edificaciones existentes y eso a los vecinos parece no gustar".
Por ello, ha recalcado que recibirá a esos vecinos y les escuchará, al igual que con motivo de la ejecución del proyecto de regeneración del río Huerva se han mantenido cerca de 40 reuniones con diversas asociaciones, colectivos y entidades con sensibilidad medioambiental.
"Tenemos tiempo en el sentido de que las pasarelas, dentro de lo que es la ejecución de la obra, es en un momento posterior, por lo tanto, hay tiempo para hablar con ellos y para intentar que Ecociudad, como equipo redactor de este proyecto, intente implementar algunas medidas que palien, en parte, algunos de esos perjuicios que dicen se les va a causar".
También ha dejado claro que se va "a intentar cumplir con todos los parámetros técnicos del proyecto" de modo que se intente "minimizar al máximo las posibles afecciones" que puedan llegar a tener, al tiempo que se cumplirán con los aspectos jurídicos del plan general en cuanto al retranqueo entre edificaciones para cumplir con la legalidad.
"Estoy seguro de que vamos a intentar paliar algunos de los efectos que dicen ser negativos sobre sus edificaciones cercanas" ha dicho Serrano para estimar que algunas, "son comprensibles", pero ha cuestionado otras que consideran los vecinos que afecta a la seguridad. "Al haber siete metros desde la pasarela a la edificación más cercana no conozco mucha gente que salte siete metros para poder encaramarse a un balcón en horizontal", ha expresado.
"NO HAY MARCHA ATRÁS"
No obstante, ha aseverado van a estudiar este asunto "con sensibilidad y con la intención de que los vecinos estén lo más confortables posibles dentro de un proyecto que no cabe echar atrás".
Entre las razones que ha esgrimido es al tener fondos europeos si no se cumple estrictamente con el cronograma establecido y se modifica una pasarela supondría paralizar el proyecto, no cumplir con ese compromiso y la ciudad perdería en torno a los 7 millones de euros.
Oro argumento es que el Gobierno de la ciudad, "sin perjudicar a ningún vecino, tiene que velar por el interés general" y el proyecto de Río Huerva "va a beneficiar a toda la ciudad, que va a cambiar Zaragoza, pero sobre todo que va a beneficiar a los vecinos porque tendrán un proyecto de restauración fluvial de primerísimo nivel".
En declaraciones a los medios de comunicación, Serrano ha incidido en que se intentará que durante la ejecución de la obra el impacto "sea mínimo posible", también atenderá a todo lo relacionado con la seguridad para que cuando se inaugure la obra se implemente.
Con respecto a la reducción de alturas de la pasarela ha recalcado que es una "imposición técnica de la CHE por las posibles avenidas del río, por lo que supone desde un punto de vista de cumplimiento legal la ocupación del dominio público hidráulico, al establecer la CHE una serie de prescripciones esas pasarelas "tienen que ir a esa altura".
A colación, ha comentado que los vecinos del entorno que no están afectados por tener la pasarela justo enfrente la reclaman continuamente, porque la única existente está en un estado muy degradado y la nueva construcción mejorará la movilidad entre una margen y otra del río.
"Entendemos que estas pasarelas no solamente tiene un criterio de embellecer más o menos un proyecto, sino que fundamentalmente tienen un criterio de movilidad de mejorar la conexión entre las distintas calles de la ciudad".