ZARAGOZA 28 Ene. (EUROPA PRESS) -
Caja Inmaculada está construyendo una biblioteca en pleno centro de Zaragoza, con capacidad para 150 personas, en un antiguo local de la calle Alfonso I, número 29, propiedad de la entidad, y próximo al Centro Joaquín Roncal de la Fundación CAI-ASC. Su apertura está prevista para mediados de 2008.
La entidad de ahorro informa en un comunicado de que la biblioteca tendrá una superficie útil de más de 600 metros cuadrados, distribuidos en dos plantas, y contará con salas para estudiar, realizar trabajos y utilizar internet.
Con esta obra social, CAI amplía la oferta de bibliotecas en la capital aragonesa y dota de nuevos equipamientos culturales su casco histórico, agregan las mismas fuentes, que precisan que el objetivo de la Caja es atender las necesidades actuales de los escolares y universitarios, principalmente, que demandan cada vez más este tipo de centros.
La biblioteca se ha concebido como un espacio moderno, amplio, cómodo y luminoso "que ofrecerá una atmósfera adecuada para el estudio y la concentración". Además, "tendrá un horario amplio, sobre todo en épocas de exámenes y fines de semana".
En la planta baja del edificio se crearán una sala destinada a nuevas tecnologías, con 40 puestos de internet, una zona para la lectura de prensa y otra de relax, aisladas acústicamente, con diferentes servicios.
La planta sótano estará destinada a sala de estudio, con capacidad para 95 personas. La fachada también tendrá un diseño muy innovador y elementos visuales, "que invitarán a entrar y usar las instalaciones", comentan desde la entidad de ahorro.
Las obras de rehabilitación y el equipamiento supondrán una inversión superior al millón de euros, al que hay que sumar el valor del local, adquirido por la Caja en enero de 2004.
TERCERA BIBLIOTECA EN ZARAGOZA.
La futura biblioteca de la calle Alfonso se sumará a las otras que la Caja tiene en Zaragoza, la biblioteca 'CAI Mariano de Pano', situada en la calle Capitán Portolés, y la biblioteca 'CAI Universidad de Zaragoza', en la calle Maestro Serrano, junto a la Ciudad Universitaria de la Plaza San Francisco.
Desde la CAI recuerdan que la Obra Social de Caja Inmaculada "ha dedicado desde sus orígenes un importante esfuerzo a apoyar la cultura y la formación, así como a fomentar la lectura y facilitar el acceso a la información".
En este sentido, destacan que la primera obra social de la Caja fue una biblioteca, denominada 'Biblioteca Ambulante de Artes y Oficios y Conocimientos Útiles' que comenzó a funcionar el 1 de septiembre de 1905.