ZARAGOZA 21 Sep. (EUROPA PRESS) -
El director general de Patrimonio Cultural del Gobierno de Aragón, Jaime Vicente Redón, ha anunciado hoy que tras casi un año de trabajo, la restauración de las pinturas murales que decoran la cúpula de la Basílica del Pilar, pintada por Francisco de Goya en 1881, que representa la Regina Martyrum, podría estar lista para ser inaugurada y contemplada por parte del público a final del presente año.
Jaime Vicente Redón se ha reunido hoy con los miembros de la comisión de seguimiento de la restauración de la cúpula, de la que forman parte el Gobierno de Aragón, el Ministerio de Cultura y la Fundación Caja Madrid. El presupuesto de las obras asciende a 900.000 euros aportados a partes iguales por el Gobierno de Aragón y la Fundación Caja Madrid.
El director general de Patrimonio Cultural aseguró que "el proceso de restauración ha sido estupendo, la empresa ha trabajado magníficamente, los directores técnicos están muy satisfechos del trabajo y nosotros como responsables de la restauración también". Además, apuntó que "el trabajo ha quedado magnífico" y explicó que "se han reintegrado las zonas que estaban con problemas, se han eliminado todos los problemas de sales, las filtraciones que habían sido eliminadas ya en fases anteriores y realmente el aspecto que en este momento tienen las pinturas de Goya son magníficas", concluyó Vicente Redón.
El equipo técnico, a cargo de la empresa adjudicataria de los trabajos, TRACER Restauración y Conservación S.L., y bajo la dirección de los técnicos propuestos por la Diputación General de Aragón y el Ministerio de Cultura, ha recorrido palmo a palmo la superficie pictórica y ha efectuado minuciosos y precisos tratamientos para recuperar este conjunto.
Las labores fundamentales realizadas desde la última reunión de la comisión de seguimiento se han centrado en el tratamiento de las grandes grietas y lagunas existentes, eliminando los morteros aplicados en las sucesivas intervenciones, algunos de ellos por presentar excesiva dureza y otros por demasiado frágiles o por estar cubriendo parcialmente la pintura original.
Las pinturas de la cúpula han sufrido numerosas limpiezas, especialmente durante el pasado siglo cuando se realizaron la mayoría de las intervenciones de restauración, en la reciente actuación se ha efectuado un compensado tratamiento de limpieza, con el fin de eliminar manchas y la película de suciedad ambiental depositada sobre la superficie pictórica.
"Se ha terminado el trabajo de restauración de la cúpula", explicó Jaime Vicente Redón, "quedan los últimos detalles cuando se instale la iluminación definitiva para poderlo entonar con la temperatura de luz y la tonalidad cromática que aporte la iluminación". Además, señaló que "comienzan de manera inmediata la restauración de las pechinas una vez que se haya adaptado el andamio para trabajar sobre esta superficie".
Las pechinas situadas bajo el gran conjunto mural fueron pintadas por Goya tras terminar la cúpula, representan las cuatro virtudes. Se realizará un tratamiento similar al efectuado en el resto de las pinturas, teniendo en cuanta que aquí la presencia de repintes es abundante. Una vez concluida la restauración de este importante conjunto pictórico, se dotará a la cúpula de una iluminación adecuada que realce y permita la contemplación y disfrute de esta obra de arte.