ZARAGOZA, 23 Ene. (EUROPA PRESS) -
Los usuarios de las Casas de Juventud municipales se muestran satisfechos con los servicios que se prestan en ellas, tal y como se plasma en un estudio encargado por la Delegación de Juventud del Ayuntamiento de Zaragoza.
Sobre un total de 100 puntos posibles --utilizando el Índice de Percepción de la Calidad de los Servicios (IPCS)--, los jóvenes entrevistados califican con un 90,85 la calidad de las Casas de Juventud de la capital aragonesa. La satisfacción global alcanza un resultado de 4,06 puntos en una escala del 1 al 5.
El estudio se ha llevado a cabo realizando 621 entrevistas personales a usuarios de las Casas de Juventud del 7 al 19 de noviembre pasados. Entre los datos que aporta destaca que más de la mitad de los jóvenes que utilizan este servicio son varones con edades comprendidas entre los 15 y los 22 años.
Los usuarios acuden con mayor frecuencia a las casas para realizar actividades programadas, como cursos o talleres, y también para el acceso de Internet en las salas de ciberespacio.
Los puntos más y mejor valorados por los usuarios de las Casas de Juventud son la amabilidad en el trato del personal, la ubicación de las mismas y la información sobre las actividades y sobre las instalaciones. Algunas de las sugerencias que plantean los jóvenes para mejorar los índices de calidad son ampliar las salas, aumentar el número de ordenadores o la adquisición de nuevo mobiliario, como por ejemplo futbolines.
La teniente de alcalde de Juventud y Deportes del Ayuntamiento de Zaragoza, Mar Herrero, ha considerado "positivas las conclusiones del estudio que viene a demostrar que los jóvenes se encuentran satisfechos con los recursos municipales destinados a ellos".
Asimismo, Herrero ha mostrado su disposición "a seguir trabajando para mejorar en lo posible el servicio, recogiendo para ello las sugerencias de los verdaderos protagonistas, los propios jóvenes". La encuesta se enmarca dentro del Plan Municipal de Calidad, implantado en el Ayuntamiento de Zaragoza desde el 2002.
