OVIEDO, 26 Ago. (EUROPA PRESS) -
La ganadería Cabrero, en el centro de Asturias, cuenta ya con más cien cabezas de buey asturiano, que la convierten en la mayor y más especializada de Asturias. Quien lo desee puede visitar los espectaculares ejemplares, que superan en muchos casos los mil kilos, en una de las fincas en las que pastan en Villamiana, a pocos kilómetros de Oviedo.
Los bueyes de la raza casina pueden alcanzar los 1.400 kilos y presentan un porte especial. En su crianza se cuidan los detalles para obtener un producto de la máxima calidad y desde sus inicios la Ganadería Cabrero ha primado esos valores. El buey destinado a la producción de carne no realiza trabajos de arrastre y se alimenta con pasto natural criándose al aire libre, y pienso de producción propia elaborado con materias primas de la máxima calidad.
Desde el inicio, José Manuel Suárez, propietario de la ganadería, se esmera en cuidar una raza producto del cruce de animales de raza Casina y Asturiana de Los Valles que convierte a los bueyes nacidos en la ganadería en exclusivos y cien por cien asturianos.
En 2012 comenzaron los trabajos para enfocar la Ganadería Cabrero hacia la producción de bueyes asturianos para carne. Con el apoyo de Iván Suárez, hijo del propietario de la ganadería y hostelero, se ha desarrollado hasta alcanzar el centenar de cabezas y empezar a sacrificar sus propios animales para el consumo. El buey es una carne escasa dado que ya no es frecuente en el campo al ser sustituido para las labores de arrastre por las máquinas, y para poder considerarse como tal debe tratarse de un macho castrado y de al menos cuatro años de edad.
Es poco frecuente además poder visitar y contemplar en directo, con la guía y explicación del ganadero, unos animales tan espectaculares. En una experiencia gastronómica que va más allá de la mera degustación del producto, en El Llagar de Colloto se puede realizar y comprobar la calidad de la carne del buey casín en diferentes formatos, desde el tradicional chuletón hasta la hamburguesa.
