OVIEDO, 19 May. (EUROPA PRESS) -
El presidente del Principado de Asturias, Adrián Barbón, ha asegurado este miércoles que defiende los intereses de la región "por tierra, mar y aire", ante las críticas de la portavoz del PP, Teresa Mallada, quien le ha dicho que su influencia en Madrid es "marginal".
Barbón ha defendido, durante la sesión plenaria de este miércoles, que cuando la Administración autonómica tiene que "discrepar" con el Gobierno central, lo hace desde la "seguridad" de contar con la militancia socialista y con el respaldo electoral "de la mayoría del pueblo asturiano".
Así, ha rechazado que el Principado "calle" en aspectos perjudiciales para la región. "No callamos", ha dicho, ni en el estatuto de las electrointensivas, en la reclamación judicial del IVA, la gestión del lobo o el cobro de peajes en autovías.
Ha negado también que no tenga influencia en Madrid. "El mejor caudal para ver dónde hay influencia o no son los Presupuestos Generales del Estado", ha dicho, remarcando que en Asturias la inversión por habitante es de 370 euros frente a los 258 de media.
"Dice que no conseguimos nada", le ha rebatido a Mallada, para después mencionar la consecución del contrato para la construcción de los 8x8 en la fábrica de armas, el rescate de Duro Felguera, la revisión del ingreso mínimo vital o las obras en Arriondas para evitar las venidas del río. El presidente ha lamentado que Mallada "se alegre" de las malas noticias y "no colabore" a que haya buenas.
Por su parte la portavoz del PP le ha pedido que se apoye en su formación para "defender contundentemente" Asturias en Madrid, y ha pedido que no se "calle" ante la campaña de "acoso y derribo" que a su juicio el Gobierno central está llevando a cabo con la región.
La líder de los 'populares' asturianos ha lamentado el "balance desolador" que a su juicio arrojan las medidas adoptadas desde el Gobierno Central para Asturias, y ha puesto en cuestión la "capacidad" de Barbón para "hacer valer" la posición asturiana en Madrid en cuestiones como la financiación autonómica, el reconocimiento de la figura del consumidor hiperelectrointensivo, o la financiación de proyectos de transición justa.