Condenado a ocho años un hombre que propinó una paliza a otro y le hizo perder un ojo

Actualizado: miércoles, 23 abril 2014 10:44

OVIEDO, 23 Abr. (EUROPA PRESS) -

La sección octava de la Audiencia Provincial de Oviedo, con sede en Gijón, ha condenado a J.J.S. como autor de un delito de lesiones a la pena de ocho años de prisión por agredir en la madrugada de julio de 2012 a J.V.C.G., de 63 años, quien, a consecuencia de la paliza recibida, perdió el ojo derecho. A pesar de que la acusación pedía diez años de prisión, el tribunal ha decidido aplicar la atenuante de embriaguez.

La sentencia, consultada por Europa Press, también establece que el agresor indemnice a la víctima con 85.207 euros, al Servicio de Salud del Principado de Asturias (Sespa) con 4.130,12 euros, y al pago de las costas, incluidas las de la acusación particular.

Tanto el procesado como la víctima y otro cliente se encontraban en la madrugada del 14 de julio de 2012, bebidos, en el bar 'Aitor', en la calle Pizarro número 17 de Gijón. J.V.C.G. optó por irse a casa, pero al poco tiempo volvió al establecimiento solicitando ayuda, porque había un señor en la calle tirado en la acera.

Ante la noticia, el acusado, J.V.C.G. y otro cliente salieron al exterior para ayudar al hombre que estaba en el suelo. Según se relata en la sentencia fue en ese momento, cuando sin que conste que hubiera motivación alguna para ello, el procesado, persona "de carácter violento", procedió a propinar puñetazos a J.V.C.G. hasta hacerle caer al suelo, situación en la que comenzó a propinarle patadas en la cabeza "con gran brutalidad y de forma reiterada".

Un vecino avisó a la Policía ante la "salvaje agresión" y un ciudadano tuvo que intervenir para intentar sujetar al procesado. En ese momento dejó de darle golpes y huyó precipitadamente a la carrera.

Llegados al lugar efectivos policiales y ante la evidente gravedad de las lesiones que presentaba la víctima, procedieron a auxiliarle para su traslado inmediato al hospital de Cabueñes, en donde fue intervenido quirúrgicamente de urgencia por presentar traumatismo cráneo-encefálico con estallido de globo ocular derecho, viéndose los facultativos obligados a efectuar una traqueotomía urgente durante la intervención. No obstante dicha intervención, no se pudo evitar la pérdida del ojo derecho que tuvo que ser extraído.