OVIEDO, 25 Abr. (EUROPA PRESS) -
El eurodiputado asturiano del Partido Popular Europeo (PPE), Salvador Garriga, dijo hoy que al presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, le queda "poco tiempo" para cumplir sobre el compromiso que realizó en la fiesta socialista de la minería de Asturias y León, en Rodiezmo, cuando aseguró que la revisión del Reglamento 1407/2002 sobre las ayudas estatales a la industria del carbón iba a ser una prioridad de la Presidencia Española de la Unión Europea.
En declaraciones a Europa Press, Garriga señaló que ya han sido consumidos cuatro de los seis meses que dura la citada Presidencia y que "no hay noticias" ni parece que haya "voluntad alguna" de que el Gobierno esté impulsando la revisión del Reglamento de.
Recordó que a comienzos de este año el Director General de Energía del Ministerio, Antonio Hernández, declaró que, aún siendo un asunto importante para España, el carbón no constituye una prioridad de la Presidencia española. "A pesar de los intentos de rectificación posterior por parte de diferentes miembros del Gobierno socialista y destacados dirigentes de la FSA, lo cierto es que el documento de prioridades de la Presidencia así lo constata, sin una sola mención a la expiración de las ayudas al carbón o a la modificación del Reglamento actualmente vigente. Lamentablemente, no hay nada de nada", señaló Garriga.
El eurodiputado asturiano dijo que por el momento, el Plan Nacional de Reserva Estratégica del Carbón 2006-2012 -instrumento de establece las bases para la planificación de ayudas en el sector del carbón-, recoge el compromiso de solicitar a la Comisión Europea la elaboración de un nuevo reglamento de ayudas que vaya hasta 2018. A su juicio, el problema de fondo es, como se afirma en este documento, que las ayudas a la reactivación de las comarcas mineras no han conseguido promover, en general, un nivel de actividad suficiente y diversificado para superar la dependencia que dichas comarcas tienen respecto a la minería del carbón. Esta circunstancia, que puede parecer bastante previsible, es en sí misma criticable para Garriga. "Después de años y años de ayudas no se han conseguido los objetivos de las mismas y un marco de ayudas con horizonte temporal indefinido es, por tanto, insostenible", comentó.
El hecho de que el Reglamento expire a finales de este año no quiere decir que las ayudas desaparezcan, apuntó. Si no hay un nuevo Reglamento las ayudas tendrían que estar sometidas al régimen general de ayudas de Estado, recogido en los artículos 107 a 109 del Tratado y, si éste fuera el caso, la concesión de ayudas sería más difícil. Más aún, el Plan Europeo de Recuperación Económica contempló la financiación europea de las plantas de combustión limpia del carbón, que podría volver a poner en valor la producción carbonífera Europea. "Dichas plantas están ya en vías de ejecución y Asturias ha perdido el tren de esas ayudas", recordó Garriga.
Durante los próximos meses de junio o julio, añadió, la Comisión Europea hará su propuesta y, en caso de que se optara por dejar que expire el Reglamento y elaborar una Directrices para la aplicación de las disposiciones del Tratado al sector del carbón, la Comisión podría actuar de forma autónoma, sin consultar a Consejo o Parlamento. Si se optara por un nuevo Reglamento, la Comisión sí consultaría al Parlamento y el Consejo decidiría por mayoría cualificada. Los fundamentos más probables para justificar un nuevo marco de ayudas al sector del carbón son los relativos a la cohesión social y regional. En cualquier caso, el marco será más estricto que el actual.
