Los pescadores vascos, partidarios de reabrir la pesca de la anchoa con un TAC "pequeño" de 7.000 toneladas

Las cofradías del Cantábrico Noroeste intentan acordar en Gijón un plan que incluya el "autocontrol" de las propias capturas

BILBAO/GIJÓN, 16 Jun. (EUROPA PRESS) -

El presidente de la Federación de Cofradías de Bizkaia, Iñaki Zabaleta, aseguró hoy que los arrantzales vascos son partidarios de reabrir la pesquería de la anchoa con un TAC (Total Admisible de Capturas) de 7.000 toneladas. Los representantes del sector del Cantábrico Noroeste se encuentran reunidos desde esta mañana en Gijón para analizar la situación e intentar acordar un plan que incluya el "autocontrol" de las propias capturas.

El stock de anchoa del Golfo de Bizkaia, cerrado a la pesca en los últimos años, alcanza en la actualidad las 28.000 toneladas, 7.000 más del límite marcado por Europa, pero 5.000 por debajo de la Biomasa de Precaución, que permitiría la reapertura de los caladeros.

En declaraciones a Europa Press, Zabaleta deseó que, a la espera de conocer el informe de los franceses y, posteriormente, de saber qué aconseja la Comisión Europea, el Consejo de Ministros europeo dé el visto bueno a una "apertura controlada" de la pesquería.

"Nosotros lo miramos en positivo, y con la recuperación experimentada, entendemos que se puede abrir la pesquería con un TAC controlado de 7.000 toneladas", dijo.

Recordó que cuando se cerraron los caladeros para recuperar el stock, los pescadores confiaron en que la solución iba a ser más rápida. "Pero -agregó- ya van para cinco años y se va recuperando lentamente. Nosotros entendemos que, con un plan a largo se puede trabajar".

Según Zabaleta, si se recupera la biomasa, se podrá mantener el TAC de 7.000 toneladas y, con el tiempo, "ir aumentándolo poco a poco". "No sabemos cuántos años tendremos que esperar para que la biomasa llegue a las 33.000 toneladas de referencia y la idea sería recuperarlo poco a poco, gestionando año a año", explicó.

"RECUPERAR LA ANCHOA O PERDER LA FLOTA"

Para el responsable de las cofradías vizcaínas, una oposición del Consejo de Europa supondría una "mala noticia". "Nosotros hemos sido siempre los más interesados en que se recupere la pesquería, siempre hemos dicho que había que cerrarla para que se recupere", recordó.

Sin embargo, el largo espacio de tiempo que la anchoa está necesitando para su recuperación coloca a los pescadores en la disyuntiva de "recuperar la anchoa o perder la flota". En su opinión, lo adecuado sería "recuperar la especie poco a poco, intentando mantener la flota".

"Se trata de una situación extrema, por lo que creemos que se puede abrir, con un plan a largo. Si vemos que empeora, habrá que cerrar, pero vamos a intentarlo siendo responsables", señaló.

Para Zabaleta "sería gracioso" que los ministros europeos de Pesca no atendieran sus peticiones porque "cuando decíamos para cerrar, ellos no se oponían y ahora que decimos para abrir, con un plan de recuperación a largo plazo, bien estudiado, sería gracioso que no lo cierren".

Los pescadores del sector han comunicado sus impresiones al Ministerio, del que esperan que les cite a una reunión "para conocer cuál es la idea del sector" y "la hoja de ruta que pretendemos aplicar".

REUNIÓN EN GIJÓN

Los representantes del sector de todo el Cantábrico noroeste --Galicia, Asturias, Cantabria y País Vasco--, alrededor de 200 buques dedicados a la captura al cerco, se encuentran reunidos en Gijón desde esta mañana para elaborar un plan para el próximo semestre, en previsión de que se reabra la pesquería.

En su opinión, es preciso un "autocontrol" de las propias Cofradías, "de forma que se consiga una autolimitación" con la ayuda de las propias autoridades autonómicas. "Como estemos todos de acuerdo y alguien lo incumpla, habrá que ir a por él con todas las consecuencias, en plan duro", dijo.