El proceso para aprobar la toponimia de Tapia comenzó en 2006 y en una década no hubo ninguna queja, según D'Andrés

Faro, Tapia de Casariego, Mar, puerto
EUROPA PRESS
Publicado: miércoles, 24 enero 2018 20:39

OVIEDO, 24 Ene. (EUROPA PRESS) -

Las primeras reuniones para adecuar la toponimia de Tapia comenzaron en 2006 después de una solicitud del mismo Ayuntamiento. En más de una década de trabajos --hasta que el BOPA publicó este 11 de enero el decreto que ha oficializado la toponimia tradicional de este concejo--, el Ayuntamiento sólo presentó cinco alegaciones, "ninguna referida al nombre de la capital", ha señalado el filólogo Ramón d'Andrés.

El profesor de la Universidad de Oviedo era jefe del Servicio de Política Lingüística de la Consejería de Cultura en esa época, cuando el Ayuntamiento de Tapia solicitó al Principado el estudio de su toponimia tradicional para hacerla oficial, de acuerdo con lo que marca la legislación asturiana desde la aprobación de la Ley de Uso y Promoción del Asturiano de 1998. Además, desde su constitución en el 2003, D'Andrés es miembro de la Xunta Asesora de Toponimia del Principáu d'Asturies.

El profesor ha explicado en declaraciones a Europa Press que, después de que el Ayuntamiento solicitara el comienzo del proceso, en abril del 2006 llegó a realizarse una sesión de trabajo en la misma Casa Consistorial de Tapia. Así, ha afirmado que siempre ha habido una "comunicación fantástica con el tema de toponimia" con este municipio e indica que el alcalde por entonces, el 'popular' Gervasio Acevedo, era una de los alcaldes "más amables y comprensivos con el proceso".

El filólogo dejó el cargo en el Gobierno asturiano en agosto del 2007, pero ha seguido involucrado en el proceso hasta hoy como miembro de la Xunta Asesora de Toponimia del Principáu d'Asturies, al ser el vocal nombrado por la Universidad de Oviedo en este organismo asesor del Ejecutivo asturiano.

Así, ha recordado que en abril de 2016 el Ayuntamiento de Tapia envió cinco alegaciones sobre otros cinco topónimos, "pero ninguno de ellos era sobre la parroquia y capital del concejo, además eran observaciones menores", ha explicado D'Andrés, que añade que es "algo normal" que los Ayuntamientos hagan observaciones sobre cuál tiene que ser la toponimia oficial de sus lugares de población.

El dictamen definitivo, aprobado por el Pleno del Ayuntamiento es de junio de 2017 y el decreto se aprobó en Consejo de Gobierno este 10 de enero. "Ha una tardanza muy grande desde empezó el proceso, que no sé a qué se debe, pero se resuelve fácilmente", ha indicado el profesor de la Universidad de Oviedo, que ha explicado que Tapia, como nombre de la parroquia y la capital, está así recogido "en todas las propuestas que ha habido" desde la Xunta Asesora de Toponimia.

"Los Ayuntamientos procuran informar a la ciudadanía, son ellos quienes toman la decisión y el Consejo de Gobierno no aprueba nada antes de aceptarlo el Ayuntamiento en Pleno", ha dicho D'Andres. "Lo que oficialmente era Tapia de Casariego pasará a ser Tapia y nunca ha habido ninguna objeción del Ayuntamiento en ese sentido, no sé ahora a qué viene esto", ha afirmado en relación con las polémicas sobre que la villa de Tapia pierda el apellido 'de Casariego', aunque el concejo siga conservándolo.

NOMBRE DEL CONCEJO

Ramón d'Andrés ha explicado que la práctica en el proceso de recuperación y oficialización de la toponimia tradicional asturiana es que los nombres de los concejos no se están cambiando por una una interpretación "restrictiva" de la Ley de Bases de Régimen Local.

"En la época en la que fui jefe del Servicio se hizo una consulta jurídica dentro de la Consejería y la visión era que no se podían cambiar. Sin embargo, en ese momento, hice alguna consulta a juristas externos y me dijeron que no un había ningún problema. Había dos interpretaciones, una más generosa y otra más restrictiva y se impuso la restrictiva", ha afirmado.

Con todo, ha explicado que había concejos que sabiendo que no podían cambiar el nombre "querían cambiarlo para cuando se pudiera". "Acordar el cambio y dejarlo ahí para cuando se pudiera cambiar completamente", ha explicado el profesor y miembro de la Xunta Asesora de Toponimia.