GIJÓN, 8 May. (EUROPA PRESS) -
El psiquiatra del hospital Gregorio Marañón, Enrique González Duro, señaló hoy en Gijón que el conocido como 'monstruo' austriaco, Josef Fritzl, podría decirse, desde cierta mentalidad que no es la suya, que es adicto al sexo. En su opinión, Fritzl no hubiera llegado a cometer todos los actos que hizo contra su hija y sus hijos-nietos si se le hubiera tratado a tiempo. Así lo dijo antes de su ponencia 'El riesgo de vivir: las nuevas adicciones del siglo XXI', que pronunció en la XIV Jornada Municipal sobre Drogas, en el Centro Municipal Integrado Gijón-Sur.
Según González Duro, el concepto de adicción se amplió tanto que si se hace caso a las estadísticas cada español padecería seis enfermedades. "Se llega a la exageración", indicó. Esto es así, a su juicio, porque hay "una información poco objetiva, poco contrastada y que emana de círculos poco autorizados", dijo. "Todo es una industria", añadió.
A este respecto, señaló que, especialmente, las asociaciones de autoayuda, hacen más presión cuantos más enfermos hay. Como ejemplo, citó la anorexia mental, de la que se dice que hay diez millones de enfermos.
Asimismo, el psiquiatra indicó que primero hay que saber qué es. "Se crean situaciones en que el paciente se autodiagnostica", indicó. De hecho, apuntó que el paciente le dice al médico lo que tiene y el tratamiento que tiene que darle.
Unido a ello, explicó que las adicciones cogen todos los aspectos de la vida humana. Es más, señaló que no surgen de la nada. "Lo fabricamos nosotros mismos en función de que nos conviene", agregó.
González Duro también puso el ejemplo de los adictos al amor, que en cierta medida se puede entender como una droga. Una adicción que era propia de las novelas románticas, según él, pero que ahora se ve en la realidad. Es, según el psiquiatra, el dejarlo todo por otra persona y el perder el sentido de la realidad.
