La prisión asturiana registra un récord de ocupación de 1.641 reclusos de 840 plazas
OVIEDO, 10 Dic. (EUROPA PRESS) -
Los tres presos históricos de ETA trasladados al centro penitenciario de Villabona (Asturias) en las últimas semanas, Ignacio García Arregui, apodado 'Iñaki de Rentería'; Carlos Almorza, 'Pedrito de Andoaín' y Valentín Lasarte, con motivo de la decisión del Ministerio del Interior de acercar presos al País Vasco, se encuentran conviviendo con los presos comunes.
El ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, admitió hoy que se han producido acercamientos de presos de la organización terrorista ETA a cárceles cercanas al País Vasco y añadió que también ha habido "alejamientos".
Más concretamente, Ignacio García Arregui, apodado 'Iñaki de Rentería' cumple condena en el módulo siete de la prisión asturiana; Carlos Almorza, 'Pedrito de Andoaín' está ingresado en el módulo ocho mientras que Valentín Lasarte está en el módulo cinco, todos ellos conviviendo con presos comunes, según informaron a Europa Press fuentes cercanas a la prisión.
Los presos de ETA en el centro penitenciario de Villabona, a día de hoy, son 17, de los cuales 13 son hombres y cuatro son mujeres. Una cifra, que según explicaron las mismas fuentes, "no son muy altas con respecto a otras cárceles españolas con presos de ETA".
Por su parte, el coordinador de Justicia y Libertades Públicas del PP, Federico Trillo, confirmó hoy que está recibiendo información "periódica y fluida" del Ministerio del Interior sobre traslados de presos de ETA y aseguró que la política penitenciaria, "si se hace bien", es un "acierto".
MASIFICACIÓN
En lo que respecta al número total de reclusos en la cárcel de Villabona, los sindicatos vienen denunciando el estado "de masificación" del centro penitenciario asturiano, ya que el pasado viernes se ha alcanzado un nuevo récord de ocupación con 1.641 presos, lo que supone una tasa cercana al 200 por ciento, ya que la cárcel dispone de 840 plazas residenciales repartidas en 10 módulos.
Según las mismas fuentes, la tendencia de nuevos ingresos, "lejos de invertirse", se mantiene al alza como demuestra el hecho que desde primeros de año la población reclusa aumentó casi un diez por ciento, pasando de 1.454 internos el 4 de enero a los 1.641 actuales.
