UGT dice que la ley de escuelas infantiles debe incluir la estabilización de las trabajadoras

OVIEDO 13 Jun. (EUROPA PRESS) -

El secretario del sector de enseñanza de UGT Asturias, Cristóbal Puente, ha dicho este jueves que la norma que impulsa el Principado para implantar una red de escuelas infantiles de 0-3 años ha de incluir mecanismos para estabilizar a las educadoras que ún no lo están.

Puente ha comparecido este jueves en la Comisión de Educación de la Junta General del Principado de Asturias que analiza estos días el proyecto de Ley del Principado de Asturias por la que se establece la Red Autonómica de Escuelas Infantiles, se regula su extensión y la integración en la misma de las Escuelas Infantiles Municipales.

Según ha señalado Puente ante los diputados, la única diferencia entre las trabajadoras que están estabilizadas y las que no es la decisión de un alcalde.

Pero además, Puente considera enseñanza que es necesario realizar la implementación del carácter educativo. "El carácter educativo del primer ciclo de la educación infantil no admite discusión, es que lo recoge la ley educativa", ha indicado.

A juicio de Puente, el proyecto de ley que se ha planteado es un documento "muy generalista" y si no se modifica en la línea que ha apuntado será "un proyecto fallido" y se limitará a un mero cambio de la red, que ahora es mayoritariamente municipal, y pasaría a ser autonómica.

"Pero no estaremos hablando de una verdadera inclusión del primer ciclo de educación infantil en la Consejería de Educación, con carácter educativo a todos los efectos", ha advertido, recordando a los diputados que está en sus manos el "acabar con la incertidumbre" de las profesionales.

En la misma comisión también ha participado como compareciente, a petición de Vox, la portavoz de la Plataforma contra la Cooficialidad de la Llingua, Beatriz Rodríguez. "La Consejería de Educación pretende con cuentos, leyendas y adivinanzas a través de su red de guarderías escolarizar en asturiano para que los niños de cero a tres años sientan una llingua creada artificialmente, sin importarles que sus propios progenitores ni la hablen ni la entiendan", ha advertido.

"De esta forma sibililna pretenden lograr que los más pequeños asuman una identidad lingüística que no les corresponde, lo que sin duda alguna les generará problemas y una comprensible confusión al comprobar que en sus hogares no hablan de igual modo que en sus centros escolares", ha añadido Rodríguez.