Tresviso, en pleno Parque Nacional de los Picos de Europa, celebra el 29 de junio la fiesta del Ramu

Queso Bejes-Tresviso, Picón
TURISMODECANTABRIA.COM
Actualizado: lunes, 25 junio 2012 19:23

Al final del camino se obtiene la recompensa de unas vistas espectaculares y la degustación del queso picón Bejes-Tresviso


SANTANDER, 25 Jun. (EUROPA PRESS) -

La localidad de Tresviso, en pleno Parque Nacional de los Picos de Europa, celebra el próximo viernes, 29 de junio, la fiesta del 'Ramu', que conserva toda la tradición de décadas.

Las celebraciones comienzan la víspera de San Pedro, cuando los mozos del pueblo se acercan al monte de hayas próximo en busca de un árbol con buen aspecto y consistencia al que llaman "jovera". Por su parte, las mozas del pueblo preparan el "ramu", que es un arco trenzado y adornado con flores y roscos.

El día de San Pedro, tras la celebración de la misa y de la procesión por las calles de la aldea, los vecinos se trasladan hasta la bolera del pueblo donde se halla la "jovera" untada con grasa o con jabón, por la que tendrán que subir los mozos, mientras las mozas subastan los roscos del Ramu, según la información que proporciona turismodecantabria.com, y que recoge Europa Press.

A la aldea de Tresviso, integrada en el Parque Nacional de los Picos de Europa, se puede llegar por carretera desde la vecina Asturias, o bien a pie a través de la Subida del Urdón, que parte desde el desfiladero de La Hermida y asciende por un impresionante camino tallado en roca que sigue en su inicio la garganta del río Urdón hasta llegar a la zona más alta, donde se encuentran las praderías y los invernales de Tresviso, por encima de ellos, se asoma la aldea, que conserva su fisonomía tradicional.

QUESO PICÓN

Al final del camino se obtiene la recompensa de unas vistas espectaculares de los Picos de Europa y la degustación del queso picón Bejes-Tresviso, con denominación de origen, y cuya elaboración se sigue realizando artesanalmente.

El queso picón, está elaborado con una mezcla de leche de oveja, cabra y vaca y su maduración se produce en cuevas naturales de caliza, a una altitud de 2.000 metros sobre el nivel del mar, donde permanecen entre 3 y 4 meses.