SANTANDER 26 Ago. (EUROPA PRESS) -
El 54,82 por ciento de la superficie de Parques Naturales de Cantabria corresponde al del Saja-Besaya que abarca 24.500 hectáreas del total de 44.688 que hay en la región catalogadas como parque natural.
El segundo mayor después del Saja-Besaya es el de las Marismas de Santoña que ocupan un total de 6.907 hectáreas (15,46%), seguidas del Parque Natural de Oyambre, con 5.758 hectáreas (12,88%); los Collados del Asón, con 4.740 hectáreas (10,61%), el Macizo de Peñacabarga, con 2.588 hectáreas (5,79%); y las Dunas de Liencres, cuyas 195 hectáreas representan el 0,44 por ciento de la superficie de parques naturales que hay en Cantabria.
También el Saja-Besaya, junto con el de Oyambre, fue el primero en ser declarado Parque Natural (ambos en 1988). Un año después, en 1989, recibía esta protección el Macizo de Peñacabarga; en 1996, las Dunas de Liencres; en 1999, los Collados del Asón; y, finalmente, en 2006, las Marismas de Santoña.
El Parque Natural del Saja-Besaya se ubica en el centro de Cantabria, sobre el curso medio y superior de dichos ríos y sus cuencas. Al margen de las excelentes vistas panorámicas que hay en las zonas más altas, se puede observar una rica y variada fauna, como aves rapaces (buitre, alimoche, etc.), picos picapinos, corzos, etc. Por lo que respecta a la flora, hay muy buena representación del bosque plano-caducifolio así como de pastizales de puerto.
Las Marismas de Santoña presentan una gran variedad de hábitats, ligados tanto al medio estuario, como al forestal. Además, es el humedal más importante del norte de España y está incluido en la Lista de Humedales del Convenio de Ramsar.
Es utilizado por las aves migratorias, procedentes del norte y el centro del continente, en su desplazamiento hacia tierras más cálidas. De forma global, en este espacio natural se han observado, hasta la fecha, más de un centenar de especies de aves ligadas al medio acuático.
La mayor concentración de aves en las marismas se produce a finales del mes de diciembre y comienzos de enero. En esta época, alberga una población de 10.000 a 20.000 aves, de 60 especies diferentes.
Los Collados del Asón es un macizo montañoso calizo cuyos rasgos más característicos son los derivados de la acción glaciar durante la era cuaternaria, la dinámica fluvial y los procesos kársticos que se desarrollan sobre los materiales calcáreos (lapiaces y dolinas en superficie y cuevas o cavernas en el interior). Presenta un amplio espectro de ecosistemas forestales y una variada fauna asociada a ellos.
El Parque Natural se encuentra dentro de lo que fue el amplio conjunto glaciado de la montaña oriental de Cantabria. Lo más significativo estriba en que su desarrollo alcanzó las cotas más bajas de toda la península ibérica, como muestra la morrena frontal de Bustalveinte, situada por debajo de los 600 metros de la superficie del mar.
En el Parque son visibles algunas de las formas de acumulación y erosión provocadas por el hielo destacando por su espectacularidad el Circo de Hondojón.
El Macizo de Peñacabarga, que forma parte del escenario que preside la bahía de Santander, se asienta sobre la pequeña Sierra de Gándara. En su parte superior presenta interesantes formaciones geológicas características de las formaciones cársticas. También cuenta con un mirador en el Pico Llen (569 metros) accesible en vehículo desde el que se divisa una gran parte de la marina de Cantabria y en particular de Santander y el conjunto de la bahía.
Próximo al límite con Asturias, el Parque Natural de Oyambre abarca las rías de la Rabia y San Vicente de la Barquera. Cuenta con una gran riqueza paisajística y ofrece la posibilidad de observar numerosas aves acuáticas. Además sus playas son uno de los principales atractivos de la zona.
Finalmente, la costa de Liencres alberga junto a las playas de Valdearenas y Canallave un paisaje dunar de gran extensión y con un alto grado de naturalidad. En la zona más continental se halla un pinar, que tiene un uso recreativo y deportivo.