Los trenes de Renfe en Cantabria permitieron un ahorro a la sociedad de 21 millones de euros en 2010

Estación De Renfe En Santander
EUROPA PRESS
Actualizado: viernes, 3 junio 2011 18:14

Generaron un ahorro de 7,7 millones de euros por contaminación atmosférica y de casi 5 millones por cambio climático

SANTANDER, 3 Jun. (EUROPA PRESS) -

La actividad del transporte de viajeros y mercancías de Renfe en Cantabria supuso un ahorro de 21 millones de euros en 2010, si se evalúa en términos económicos el impacto sobre el cambio climático, la contaminación y la tasa de accidentes que habría tenido realizar este transporte por otros medios, como el camión o el automóvil.

Esto quiere decir que de no haber circulado los trenes de Renfe en Cantabria, se habrían producido 1,17 millones de circulaciones en automóvil y 9.700 circulaciones de camión más de las que se produjeron el pasado año.

Estos son los datos del estudio de ahorro de costes externos generados por Renfe en 2010, que ha dado a conocer este viernes la compañía.

Según este informe, la parte más importante de este ahorro se genera gracias a los servicios de Mercancías (14,6 millones de euros), seguidos de los de Cercanías (3,2 millones), Alta Velocidad-Larga Distancia (2,8 millones) y Media Distancia (0,4millones).

En cuanto al origen de estos ahorros, los diversos servicios de Renfe en Cantabria han evitado a la contaminación atmosférica unos costes evaluables en 7,7 millones (36,6%); al cambio climático 4,9 millones de euros (23,3%); a los accidentes, 3,8 millones (18%); y a la congestión urbana 1,4 millones (7%).

El resto del ahorro por costes externos responde al ruido, efectos urbanos, efectos sobre el paisaje y la naturaleza, ocupación y fragmentación del suelo y otros efectos inducidos.

Las previsiones de Renfe indican, además, que la progresiva mejora de la eficiencia energética de sus trenes permitirá alcanzar en 2020 una reducción de sus emisiones de CO2 por Unidad Transportada (viajero o tonelada) del 57% respecto a 1990, año base de medición del Protocolo de Kioto.

Renfe destaca que la importancia del ferrocarril resulta "elocuente" en términos energéticos ya que sus trenes evitaron en 2010 la emisión de 560.000 toneladas de CO2 a la atmósfera y ahorraron en consumo energético 160.000 toneladas equivalente de petróleo.

Este análisis se realiza mediante la sustitución modal de los servicios realizados por las diferentes áreas de Renfe de acuerdo con unas hipótesis de sustitución avaladas por el Departamento de Economía del Transporte de la Universidad de Leeds.