Los escolares reivindican su derecho de participación en la sociedad

Pleno infantil en el Parlamento de Cantabria
ALDEAS INFANTILES
Actualizado: miércoles, 11 marzo 2015 16:36

SANTANDER, 11 Mar. (EUROPA PRESS) -

Cerca de 60 niños, alumnos de los colegios Manuel Liaño Berastain de Barreda y Atalaya de Santander, han ejercido este miércoles de 'Diputados por un día' en un pleno infantil celebrado en el Parlamento de Cantabria, dentro del programa de educación en valores de Aldeas Infantiles SOS, en el que han reivindicado su derecho de participación en la sociedad.

Los jóvenes diputados han trabajado en clase el valor de la atención y todos los aspectos que este concepto contempla. Tras debatir y reflexionar en clase, han elaborado unas redacciones y compromisos que sus portavoces han leído en la tribuna, en presencia del presidente del Parlamento de Cantabria, José Antonio Cagigas, y el vicepresidente de Aldeas Infantiles SOS de España, Javier Martín Burillo.

El primero en intervenir ha sido Amine Hafide, del centro de Barreda, que ha afirmado que "hay que poner los cinco sentidos en lo que estás viendo u oyendo" y a continuación ha enumerado algunos trucos para entrenar la atención. Además, ha destacado la importancia de que los niños opinen sobre lo que les afecta. "Hoy, desde esta tribuna, hacemos una propuesta: que todos los niños puedan tener voz y sean escuchados".

El portavoz infantil ha recordado la letra de la canción del artista José Luis Perales, que decía "Que canten los niños, que alcen la voz, que hagan al mundo escuchar", un tema, cuyos derechos, el compositor donó hace años a Aldeas Infantiles SOS.

Por su parte, Naomy Blanco, también del centro Manuel Liaño Berastain, ha hablado de la atención a uno mismo, la atención a los demás y la atención al entorno. En este último aspecto, ha explicado en el hemiciclo en qué consisten las "patrullas verdes" que organizan en su colegio: "Realizamos tareas de cuidado y conservación del medio ambiente en horario de recreo, como por ejemplo, revisar que estén apagadas todas las luces en las aulas, comprobar que no haya papeles fuera de las papeleras, regar las plantas, revisar los carteles que llevan el nombre de los árboles (en nuestro colegio tenemos más de 140 especies plantadas), etc.".

Por parte del colegio Atalaya, su portavoz, Susana Gómez, ha leído un discurso sobre un niño que tenía problemas de atención y que gracias a su esfuerzo, y al de sus profesores y padres, pudo superarlos. "Ahora presto atención y soy yo quien manda en mi cabeza", ha señalado la escolar.

Su compañero de centro, Pablo Romero, ha narrado en la tribuna la historia de Jaime, un niño que, aunque era muy listo, no era capaz de prestar atención y se perdía cosas importantes como una excursión de la clase.

A raíz de este incidente, aprendió a prestar atención, pero sin medida y, un día que evacuaron el colegio por fuego, tuvieron que salvarle los bomberos porque él se había quedado muy atento haciendo los deberes. La moraleja del cuento explica cómo hay que prestar atención pero sin aislarse del entorno.

Tras la lectura de los discursos, los representantes infantiles han expuesto una serie de propuestas para mejorar la atención y, así, conseguir una sociedad más amable y justa. A continuación, han procedido a depositar su voto en la urna para comprometerse a cumplir el enunciado elegido.

RESULTADOS DE LA VOTACIÓN

Los escolares se han comprometido con sus votos a "aceptar a las personas como son, sin intentar cambiarlas a nuestra conveniencia", una propuesta del colegio Manuel Liaño Beristain que ha sido la más votada, con el 21% de los sufragios.

En segundo lugar, los jóvenes diputados han optado por un planteamiento del centro de Santander, que decía "Prestaremos atención a las cosas que hacemos bien y las cosas que hacemos mal, en nosotros y en los que nos rodean. 'Allí donde fueres, haz lo que vieres'". Este compromiso ha contado con cerca del 18% de los votos.

Con el 14% de las papeletas, los niños también se han comprometido a "no juzgar a nadie por su físico sin conocer primero su interior, intentando descubrir lo que alberga su corazón", un compromiso del colegio de Barreda.