SANTANDER, 19 Feb. (EUROPA PRESS) -
La Comisión de Protección Civil de la Comunidad Autónoma, presidida por el consejero de Presidencia y Justicia, Rafael de la Sierra, ha aprobado este viernes el Plan de Formación de Emergencias y Protección Civil elaborado por el Gobierno de Cantabria que incluye 33 cursos y más de 500 horas de aprendizaje técnico para técnicos de Protección Civil y personal de los servicios de emergencia de Cantabria, así como personal de la entidad 112 Cantabria y voluntarios de Protección Civil.
Este órgano también ha informado este viernes de la revisión de ocho planes de emergencia exterior asociados a empresas que trabajan con sustancias químicas, donde se han actualizado los riesgos y se han actualizado los protocolos de actuación y medidas a implantar para prevenirlos y afrontarlos.
Respecto al plan de formación, el consejero ha resaltado su importancia para afrontar los nuevos retos de seguridad ciudadana, que "siempre existen", a través de la formación básica, especialización y actualización de los distintos colectivos a los que va dirigido.
Estos serán los tres ejes de trabajo desarrollados en el plan de formación, de cara a reducir los tiempos de respuesta, desarrollar unas mejores prácticas, perfeccionar el manejo de los equipos y propiciar canales de coordinación entre profesionales. Todo ello, a juicio de De la Sierra, "contribuirá a avanzar de forma importante en la mejora de seguridad ciudadana".
El Gobierno de Cantabria ha preparado más de 300 horas de formación para el personal del los servicios de emergencia de las administraciones públicas que trabajan en la región y que incluyen los parques de bomberos autonómicos y municipales, así como para los técnicos de Protección Civil que actúan en el helicóptero medicalizado de la Comunidad Autónoma.
En total, serán doce cursos altamente especializados que van a permitir que se adquieran técnicas específicas y conocimientos de procedimientos para responder ante riesgos especiales como intervenciones en montaña, reconocimiento y utilización de material médico en el helicóptero, atención al paciente politraumatizado, organización y mando de servicios de emergencia, y extinción de incendios en interiores.
La presencia de profesionales de las tres administraciones públicas en el plan de formación potenciará la colaboración interinstitucional y el compartir experiencias y conocimientos, de especial importancia para la mejor resolución de las emergencias y minimizar daños.
Especial atención tendrán la preparación de las agrupaciones del voluntariado de Protección Civil, dependiente de los ayuntamientos, para fomentar su formación y capacitación en las tareas de asistencia a los equipos profesionales y apoyo complementario que realizan.
Para los cerca de 700 voluntarios de Protección Civil que desempeñan su labor en Cantabria, el Gobierno ha preparado 21 cursos en distintos niveles de especialización, desde el inicial hasta el avanzado, con cerca de 200 horas de formación teórica y práctica.
Así, además de consolidar una formación inicial básica para los voluntarios de nueva incorporación se han diseñado otras acciones formativas de apoyo en incendios forestales, artefactos pirotécnicos, cartografía, coordinación con el helicóptero, uso de desfibriladores, primeros auxilios, apoyo psicológico a víctimas, evacuación y albergue en catástrofes, planes de autoprotección, apicultura y salvamento acuático, entre otros.
Se ha intentado que todos los cursos programados para la formación básica de los voluntarios de Protección Civil incorporen de alguna manera contenidos en materia de protección personal para lograr una mayor seguridad en sus intervenciones.
La oferta anual de formación inicial y continua será ejecutada íntegramente por la Escuela de Protección Civil de Cantabria y el Centro de Estudios de la Administración Regional de Cantabria (CEARC), ambos dependientes de la Consejería de Presidencia.
La programación definitiva del Plan de formación de Emergencias y Protección Civil queda abierta, de manera que se podrán incorporar progresivamente cursos que sean demandados por las distintas instituciones a lo largo del año 2016, en función de su necesidad y de la disponibilidad presupuestaria.
PLANES DE EMERGENCIA POR RIESGO QUÍMICO
Por otro lado, la Comisión de Protección Civil ha abordado el proceso de revisión y redacción de los ocho planes de emergencia exterior de las empresas de mayor riesgo en caso de accidente grave en las que intervienen sustancias químicas peligrosas.
Se han actualizado no solo las sustancias en juego sino, especialmente, los escenarios posibles, los servicios de emergencias a intervenir y las medidas a adoptar para asegurar la minimización de los daños.
Tras el estudio por parte de la Comisión regional, estos planes serán aprobados de forma definitiva por el Consejo Nacional de Protección Civil para que sean informados a los efectos de su adecuación al sistema nacional.
Estos instrumentos se redactan de acuerdo a la normativa de accidentes graves SEVESO, donde se clasifican los riesgos asociados a cada actividad y se establecen los protocolos de actuación y medidas a implantar para prevenirlos y afrontarlos.