La fachada principal y el palomar de la casa solariega de El Haya será Bien Inventariado

Plano casa solariega en Valdeolea
EUROPA PRESS
Actualizado: sábado, 9 febrero 2013 10:31

SANTANDER, 9 Feb. (EUROPA PRESS) -

La Dirección General de Cultura de la Consejería de Educación, Cultura y Deporte ha incoado expediente para la inclusión de la fachada principal y el palomar de la casa solariega situada en El Haya, término municipal de Valdeolea, en el Inventario General del Patrimonio Cultural de Cantabria como Bien Inventariado.

Según recoge el acuerdo, consultado por Europa Press, la Comisión Técnica de Patrimonio Edificado acordó por unanimidad, que se protejan esas dos partes del edificio ya que es lo único que tiene mérito histórico-artístico.

La casa solariega de El Haya fue construida en 1726, según inscripción en su fachada lateral. Actualmente, el inmueble presenta un estado de relevante deterioro, según consta en la descripción del edificio. Sólo la fachada principal y el palomar reúnen mérito histórico-artístico.

La particularidad de la fachada reside en combinar las arcadas (que dan acceso al portal o estragal), típicas de las casonas de la arquitectura montañesa de los Asturias de Santillana y Trasmiera, con las fachadas planas campurrianas.

Ciertos elementos decorativos y arquitectónicos de esta fachada son similares a los empleados en el edificio noble de las Henestrosas de las Quintanillas, declarado Bien de Interés Local mediante resolución del consejero de Cultura, Turismo y Deporte de 14 de julio de 2003.

La fachada principal tiene tres arcos rebajados sostenidos por pilares que dan acceso al zaguán. Los dos pisos están separados por una línea de imposta lisa que atraviesa toda la fachada.

En el segundo piso, encima del arco central, hay una puerta ventana con orejeras esquemáticas flanqueada por sendas pilastras cajeadas decorativas, decoración muy similar a la efectuada en el edificio noble de las Henestrosas y que denota que el arquitecto de ambas obras debió de ser el mismo o pertenecer al mismo taller de canteros.

La fachada se remata bajo el tejado con una línea de imposta que la recorre horizontalmente y con una cornisa moldurada. En el muro de cierre frente a la fachada principal se encuentra un palomar de planta cuadrada, singular en la arquitectura etnográfica tradicional de Cantabria, de los cuales apenas se conservan contados ejemplares. Al lado de este palomar debió situarse la portalada del conjunto, hoy en día desaparecida.