UC.- Una veintena de alumnos participan en el curso de surf de Somo

SOMO, 26 Jun. (EUROPA PRESS) -

Casi una veintena de alumnos de los Cursos de Verano de la Universidad de Cantabria (UC) se han vestido con neoprenos y se han subido en tablas para participar en el monográfico 'Surf: deporte, industria y factor de desarrollo económico y social. Una aproximación teórica con las actividades prácticas impartidas en inglés', que se imparte a lo largo de esta semana en el Centro de Surf de Somo.

El curso, que patrocina el Ayuntamiento de Ribamontán al Mar, en colaboración con el Plan de Competitividad del Producto Surf, tiene como objetivos el fomento de la práctica de dicha actividad y divulgar sus características como deporte comprometido con el medio ambiente.

Asimismo quiere dar a conocer la nueva industria turística, explicar aspectos de la ingeniería marina y promover el aprendizaje del inglés, ya que las clases prácticas son impartidas en el idioma anglosajón por el profesor bilingüe Damian Freeman.

Así lo ha explicado el gerente del Plan de Competitividad de Surf de Ribamontán al Mar, Luis Cayón, quien lleva tres años dirigiendo este monográfico sobre el surf, un deporte practicable en cualquier época del año, que mueve a 25 millones de personas y es capaz de impulsar proyectos complementarios de toda índole.

El surf es una actividad que se está convirtiendo en un creciente segmento del turismo en Cantabria, especialmente en el Ayuntamiento de Ribamontán al Mar, donde mueve 13 millones de euros al año, según ha señalado el profesor de Marketing Turístico de la Escuela de Turismo Altamira, Antonio Esquivias, en su ponencia 'El repunte de la demanda turística en Ribamontán al Mar y su relación con el producto surf'.

Este deporte es una industria con "alto potencial" para la región, porque como no requiere de condiciones meteorológicas específicas, puede mantenerse en la oferta turística de todas las estaciones. Gracias a ello, se conservan todo el año infraestructuras, alojamientos y servicios que, además, pueden complementarse con proyectos en relación al surf, programas de información y formación para especializar empresas en el sector o encuentros profesionales y jornadas de intercambio de experiencias, para que los agentes de esta área colaboren entre ellos.

"VIVIR LA EXPERIENCIA"

En relación a los surfistas o turistas del surf, Esquivias ha explicado que son gente que busca "vivir la experiencia" y tener un papel activo en las actividades que oferte su destino vacacional. Además, el perfil de estos deportistas ha experimentado un cambio a lo largo de los años: antes eran considerados "mochileros" que gastaban poco dinero y viajaban en furgoneta; ahora también podemos encontrar "cogiendo olas" a empresarios autónomos, gente de poner adquisitivo medio alto y con estudios superiores.

Ahora bien, estos deportistas siempre han buscado zonas de cierto nivel ecológico, debido al respeto que profesan hacia el medio ambiente, y no saturadas de turismo. Y es en esta última condición donde podría radicar el problema: por un lado se buscan playas despejadas, para poder disfrutar con libertad de las olas, pero, por otro, se requieren turistas que mantengan activas y fomenten las escuelas de surf y, además, propicien sectores turísticos complementarios, como es la hostelería.

Debido a estas divergencias, "es importante tratar al sector del surf con cautela, para incrementarlo, pero tampoco masificarlo", y para que no nazca la "turismo-fobia", como ha explicado Esquivias, en el sentido de "rechazo de los locales hacia los turistas, a quienes ven como personas que invaden su espacio y obstaculizan sus actividades cotidianas y vida diaria".

Además, uno de los alumnos del curso ha admitido que los surfistas de zonas como la de Ribamontán "deberían aprender que el surf es un deporte de invierno, porque esos turistas que copan sus playas en verano les están dando de comer".