Las grandes constructoras dicen a Fomento que la "clave" de su éxito en el exterior reside en su actividad en España
SANTANDER/MADRID, 28 Oct. (EUROPA PRESS) -
El ministro de Fomento, José Blanco, ha garantizado que su departamento se "volcará" en "apoyar decididamente" la internacionalización de las empresas constructoras e ingenierías en el exterior.
Blanco realizó esta afirmación durante su intervención este jueves en una jornada sobre los retos del sector ante la crisis, organizada por la Asociación de ex diputados y ex senadores de las Cortes.
En concreto, el ministro intervino en la jornada 'El reto de la ingeniería civil ante la crisis', celebrada en el Congreso de los Diputados, y en la que ha participado el consejero de Obras Públicas, Ordenación del Territorio, Vivienda y Urbanismo del Gobierno de Cantabria, José María Mazón.
A lo largo de la mañana, Mazón ha moderado el coloquio que se ha desarrollado entre los participantes del grupo de trabajo que, previamente, ha analizado el tema 'La actividad internacional de la ingeniería española', con la presencia de Juan-Miguel Villa Mir, presidente de OHL; Francisco Javier Gayo, presidente de SACYR; Joaquín Ayuso, vicepresidente de Ferrovial; Pedro Martínez, presidente de Acciona Infraestructuras; Ignacio Segura, director general de Dragados; Avelino Acero, director general de FCC Construcción, y Pablo Bueno, presidente del Grupo TYPSA.
Durante su intervención, el ministro subrayó que las oportunidades "ya no están únicamente en casa". "Es algo que tienen que interiorizar las empresas para afrontar el futuro y aprovechar todas las oportunidades", indicó.
Tras mencionar el último logro en el exterior, el contrato del metro de Panamá adjudicado a FCC, el ministro auguró que la construcción y la ingeniería española lograrán en breve un nuevo éxito en el mercado internacional, al asegurar que "en los próximos días" serán aún una "referencia aún más global".
"La ingeniería española tiene una clara ventaja competitiva sobre el esto, la ventaja que otorga el reconocimiento internacional. No puede discutirse que somos una referencia global, y ya les adelanto que en los próximos días seremos una referencia más global. Y lo somos con mayúsculas", declaró Blanco.
En la actualidad el sector puja por distintos importantes en el exterior, en el que destaca el de la construcción del AVE La Meca-Media, en el que es finalista un consorcio de constructoras españolas, en el que también participan las empresas de Fomento Renfe y Adif.
PRESUPUESTO NO SOSTENIBLE.
Blanco abogó por la internacionalización pese a considerar que el sector de la construcción, "fuerte y maduro", puede "asumir" que los presupuestos públicos destinados a infraestructuras en los últimos años "no son sostenibles", en un contexto de "reducción de ayudas europeas y presupuestos públicos, de difícil financiación y de infraestructuras menos rentables".
"Los objetivos de estabilidad presupuestaria son ineludibles y comprensibles en una situación económica como la actual", argumentó el ministro, pese a defender que, en el caso de Fomento, "invertir menos no significa invertir poco".
Así, destacó que el presupuesto inversor de 13.626 millones de euros con que cuenta su Departamento para 2011 es superior a la inversión media anual de unos 8.500 millones de euros que, según sus datos, supondrá el plan de infraestructuras anunciado en Reino Unido y a la prevista también en Estados Unidos con el referido plan Obama.
CONSTRUCTORAS
Por su parte, el economista y presidente de la patronal de grandes constructoras Seopan, David Taguas, indicó que el anunciado recorte de inversión en la obra pública pueden suponer un riesgo para la consecución de los objetivos presupuestos y de reducción de déficit del Gobierno para 2011.
Según el presidente de la patronal de grandes constructoras Seopan, la inversión en infraestructuras se "autofinancia" mediante recaudación en un 80%, por lo que congelar la ejecución de una obra de 100 millones de euros "no supone un ahorro de 100 millones de euros, sino de 20 millones". Este ahorro se reduce a la mitad, en caso de descontar los gastos en compensaciones y la inversión adicional a realizar cuando se reanude.
El presidente de Seopan y ex director de la Oficina Económica de Moncloa indicó que el sector de la construcción está sufriendo un doble 'shock', dado que el recorte en obra pública se suma a los problemas estructurales que arrastra el sector (sobrecapacidad, baja capitalización y gran competencia) y a la entrada en vigor de la nueva Ley de Morosidad.
Para solventar esta situación, y con el fin último de que el sector aborde de forma ordenada la reestructuración a la que se ve abocado, Taguas apuntó a la necesidad de que Fomento impulse la promoción de obras con capital privado. También solicitó un sistema de cobro por el uso de infraestructuras, y solventar los problemas económicos y contables de las concesionarias autopistas, dado que, según destacó, el sector de la concesión de infraestructuras es el único en que España es líder mundial.
SALIR AL EXTERIOR.
En otro orden de cosas, las grandes constructoras consideran necesario que se mantenga la inversión en obra pública en España, al considerar la actividad en el mercado doméstico un elemento "clave" para que el sector logre nuevos éxitos en el exterior e incremente su internacionalización.
"Las constructoras españolas somos hoy una verdadera fuerza de ingeniería, y el reto es lograr trasladar esta fortaleza al exterior. Pero para ello, es preciso mantener el nivel de inversión en España, que no se reduzca drásticamente, porque constituye el impulso para salir al exterior", aseguró el presidente de la división de Construcción de FCC, José Mayor.
"En España deben seguir saliendo contratos para poder mantener la competitividad en el exterior", apuntó de su lado el presidente de la rama constructora de Sacyr, Francisco Javier Gayo. "Nos jugamos el futuro en los dos próximos años. El Estado, mediante el recurso al capital privado, debe mantener la inversión en España para no perder a buenos profesionales y poder salir al exterior", añadió el ejecutivo.
Representantes de las seis grandes constructoras cotizadas (ACS, Acciona, FCC, Ferrovial, Sacyr y OHL) respondieron así a la llamada a salir al exterior realizada apenas unas horas antes por el ministro de Fomento, José Blanco, quien además garantizó el "apoyo decidido" del Gobierno.
